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La policía desalojó el campamente que ocupaban centenares de personas del movimiento "Ocupa Wall Street", quienes se habían instalado en el lugar hace casi dos meses en la Plaza de Nueva York.
Según el alcalde de la ciudad los que no pertenecen a Wall Street, ni siquiera podían caminar en medio de las pertenencias de los indignados.
En casi dos meses, según las autoridades el lugar se convirtió en un basural propicio para enfermedades, tráfico de drogas y violencia.
Decenas de trabajadores intentan recuperar el espacio público que volverá a estar disponible para todos en las próximas horas.
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