imagen_principal-77855.jpg
{"multiple":false,"video":[]}

Alumnos fueron recibidos en otro establecimiento mientras que la escuela Sandy Hook sigue siendo investigada.

Más de 500 niños volvieron a clases luego del incidente de Connecticut. Ellos fueron recibidos en otra escuela del pueblo de Monroe, cercano a Newtown, muchos de ellos asistieron junto a sus padres, quienes fueron autorizados a quedarse durante toda la jornada.

La policía de Monroe puso extremo énfasis en la seguridad de los recintos educacionales del pueblo, colocando cámaras de vigilancia que van directas hacia los cuarteles policiales, más otros sistemas para asegurar el bienestar de sus alumnos y funcionarios.

A pesar del reinicio, muchos de los muebles de Sandy Hook fueron trasladados a la escuela de Monroe para que los niños no sientan un brusco cambio de ambiente. Y muchos de los padres decidieron acompañar a sus hijos en clase mientras que otros decidieron poner a prueba su independencia para tratar de recuperar la paz que tenían antes del incidente.

Tags:

Deja tu comentario