El alza en en desempleo y las medidas de austeridad tienen al mandatario francés en un complejo escenario.
Un duro panorama vive en estos días el mandatario francés Francois Hollande, todo esto debido a la delicada situación que vive su país, tanto en ámbitos económicos como en el área social. Para los analistas, el fracaso en las políticas para combatir el desempleo, que asciende a 3 millones de personas sin trabajo, es el gran causante de su creciente desaprobación.
A esto se suma una nueva protesta de la ciudadanía, la que convocó a 100 mil personas y tuvo por motivo el descontento por las medidas de austeridad anunciadas por las autoridades. Otro de los puntos críticos en los que se notó su tendencia a la baja en la opinión pública fue el envío de tropas a Malí en enero de 2013, hecho que fuertemente cuestionado por la ciudadanía.
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