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La información que un submarino extranjero  extranjero se acercó a a los límites marítimos de Chile, causó cierto revuelo, aunque la Armada descartó peligro alguno.

El navío nuclear, supuestamente de Estados Unidos, tuvo un paso el 14 de mayo cerca de las costas de Antofagasta, pero su presencia no obligó a Chile a reaccionar, puesto que los radares dieron fe que transitó sumergido, sin detenerse y fuera del mar territorial chileno, tal como lo establece la legislación internacional.

Según los expertos este tipo de “pasos” son habituales y no sólo en Chile sino que en todo el mundo, ya que según las normativas internacionales del mar, permiten el “paso legal” de embarcaciones por aguas que estén bajo la tutela de algún país, siempre y cuando sea un tránsito pacífico, y no comercial y sin aviso.

En Chile, la escuadra marina puede percibir la presencia de submarinos extranjeros luego de que se instalaran sonares de alta capacidad,lo mismo que hace un sonar.

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