Este martes no hubo clases en la Región Metropolitana y en parte de la quinta región.
Una de las medidas anunciadas por el Ministerio de Educación para enfrentar este frente de mal tiempo que afecta a gran parte del país fue la suspensión de clases a escolares y preescolares en la Región Metropolitana y parte de la quinta región.
Si bien la medida tenía por fin mejorar la circulación de automóviles y proteger a los más pequeños de posibles resfríos o enfermedades ocasionadas por la lluvia, los que presentaron complicaciones con la aplicación de esta medida fueron los padres que debían trabajar hoy y que no contaban con asesoras del hogar para el cuidado de sus hijos.
La mayoría se mostró molesto con la medida debido a que expresaron que hay una gran cantidad de niños que almuerza en los colegios y que la gran mayoría de los padres no cuenta con asesoras del hogar para el cuidado de sus menores mientras ellos se encuentran en el trabajo.
Para Alan Wilkins, seremi de Educación de la Región Metropolitana, la decisión adoptada por el ministerio fue la correcta. “Una lluvia de 30 milímetros solamente en la tarde, una proyección del clima que apuntaba a duplicar los milímetros durante la noche, ante todo está la seguridad de los niños”, aseguró.
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