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 El país denuncia que la instancia tiene poca utilidad para resolver conflictos internacionales. 

En una inusual medida, Arabia Saudita finalmente decidió renunciar a su nuevo puesto en el Consejo de Seguridad de la ONU. El país, que este jueves había sido elegido junto a Chile, Chad, Nigeria y Lituania como miembro no permanente, argumentó que es una protesta contra el organismo por la falta de soluciones en los conflictos de Medio Oriente y Siria.

Según un comunicado del ministerio de Relaciones Exteriores saudí, “los mecanismos de trabajo y la doble moral en el Consejo impiden cumplir con sus obligaciones y responsabilidades”. Una frase que se contrapone con lo expresado por el embajador de Arabia Saudita ante la ONU, quien este jueves mostró su satisfacción por la elección de su país para el Consejo.

Para algunos analistas, la decisión corresponde a una protesta contra las últimas decisiones de su tradicional aliado Estados Unidos, que decidió no intervenir militarmente en Siria. 

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