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 La situación provocó que suspendieran las clases en los colegios, no habrá transporte, ni atención de bancos. 

Luego de iniciarse una huelga por parte de la policía con el fin de pedir mejoras salariales en Córdoba se produjo una ola de saqueos a supermercados y al comercio local.

El caos que generó la falta de presencia policial, obligó a que este miércoles se suspendieran las clases, no habrá transporte, ni atención de bancos, lo que afectó incluso el funcionamiento de la administración pública. La policía cordobesa tiene alrededor de 22 mil efectivos y el acuartelamiento tuvo un 90% de adhesión. Alrededor de 15 supermercados en la periferia de la ciudad sufrieron saqueos o ataques a pedradas. En el transcurso de la noche hubo alrededor de 60 heridos y 52 detenidos.

El Gobernador, José Manuel De la Sota, volvió en la madrugada a la provincia de forma urgente desde Panamá, criticando a los policías diciendo que “Un grupo de policías no puede poner en peligro a los cordobeses”, también aseguró que no habrá negociación con los efectivos hasta febrero.

Además, el gobernador, intentó comunicarse a través la red social Twitter, pidiendo ayuda a la Gendarmería de Córdoba, indicando que no fue posible un contacto telefónico con los efectivos.
 

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