Al interior del oficialismo algunos culpan al gobierno del mal resultado en las elecciones.
La derrota de la candidata oficialista Evelyn Matthei en la segunda vuelta para algunos gatilló finalmente una “noche de los cuchillos largos”. Mientras que en la Alianza aseguran que el gobierno tiene una gran responsabilidad por el resultado, el Ejecutivo evitó entrar en la polémica.
La vocera Cecilia Pérez, aseveró en el día después de las elecciones que: “quienes quieran sangre, no la van a tener de nosotros”. En tanto, el ministro Andrés Chadwick defendió el actuar del gobierno y aseveró que no serán parte de “recriminaciones mutuas” y aportarán a un clima de “serenidad”.
“Hemos tenido un déficit político que tiene que ver a veces con algunas malas declaraciones que nos habría encantado que no se hubiesen hecho, pero también con no haber sido capaces de proyectar a futuro cuál es el proyecto que se tiene no para cuatro años, sino para 8, 10, en 12”, explicó el diputado electo Jaime Bellolio (UDI).
“El resultado es como el forro (..) fue malo. Están los propios errores que el gobierno pudo haber cometido desde el punto de vista político”, aseveró el diputado Cristián Monckeberg. “El gobierno tiene una cuota de responsabilidad mayor, faltó la sintonía fina, de transmitir todo lo que el gobierno había hecho”, expresó el diputado José Antonio Kast. “Hizo un gran gobierno en gestión, pero nefasto gobierno en lo político”, remarcó el senador electo Manuel José Ossandón.
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