La atleta nacional anunció que después de los Juegos Olímpicos de 2016 dejaría el deporte.
Érika Olivera, una de las velocistas más conocidas del país, anunció su retiro después de Rio 2016. La deportista comentó que su idea original era retirarse en los juegos olímpicos del 2012 en Londres, pero según ella, “tenía nivel y rendimiento para lograr otro ciclo olímpico“.
Para cumplir dicho objetivo, deberá participar primero en los Juegos Panamericanos que se efectuarán en Toronto, Canadá, el próximo año, y así lograr la clasificación a las justas olímpicas. “Quiero dejar una buena impresión a la hora de mi retiro“, declaró.
Luego de su retiro, comenta el “sueño” que tiene de involucrarse en la política, pues a su juicio, “se debe trabajar mucho por el deporte y hacer que vean a este como una profesión“. Además de declarar que el deporte debe ir de la mano de la política, para así “lograr dar apoyo a quienes quieren entrar a este mundo”.
Olivera cuenta en su haber con una medalla de oro las justas olímpicas de Winnipeg 1999, cuatro veces plusmarquista nacional de fondo, campeona iberoamericana en 2 ocasiones, y 3 récords juveniles sudamericanos, además de un club que lleva su nombre, donde entrena a jóvenes que quieren seguir el camino del deporte.
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