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Una recopilación de la polémica rutina del comediante.


Edo Caroe conquistó al “Monstruo” de Viña, con su humor rápido, ácido y sin censura. Una rutina en la que repasó largamente a la clase política chilena, desde la Presidenta Bachelet, hasta el Parlamento.

A continuación un resumen de los mejores chistes cortos de la noche.

– Si en algún momento de la rutina, ofrezco Bono Marzo, estoy improvisando.

– ¿Se han dado cuenta como se tiran la pelota en La Moneda? Marcelo Díaz se lo tira a Burgos, Burgos a Bachelet y ahí… ¡bono!.

– David Copperfield se colgó en Estados Unidos para hacer escapismo y todos lo aplaudieron, si yo me encadenara aquí en Chile dirían: “Ah, mira, otro deudor habitacional más”.

-Todos celebramos que Jarita metió un dedo y Sergio Jadue nos estaba metiendo el brazo hasta el codo.

– Una cosa que debería morir en Chile es la Onemi, el ícono de la inoperancia y con un sistema ordinario.

– Dávalos borró toda la evidencia de su computador. Ahí podemos decir que aprendió de Pinochet: borró todo lo relacionado con el PC.

-El senador Pizzaro, cuando su región más lo necesitaba se manda a cambiar a Inglaterra al mundial de Rugby. El rugby es un deporte de caballeros, ¿qué hacía Pizarro ahí?

– El caso Dávalos sirvió para que todas las madres que pensaban que tenían un hijo huevón  dijeran “pudo haber sido peor”. De hecho, la mamá del Cisarro dice “qué terrible todo esto, me saqué el Loto”.

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