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Dependían de que un empate de su escolta, y pasó.

Así funciona la tabla voladora que rompió el récord mundial de distancia

El empate 1-1 del líder de la Premier League, Leicester, frente al Manchester United en Old Trafford los dejó a un pelo de coronarse campeón por primera vez en su historia, y de manera épica.

Eso sí, dependía de que el Tottenham, su escolta, no ganara en su visita al Chelsea. Este lunes, el escenario ocurrió. El 2-2 en Stanford Bridge le dio la corona a los “foxes”.

La escuadra controlada por el grupo tailandés King Power, y dirigida por el DT revelación, Claudio Rainieri, pasaron de ser un equipo de la parte media-baja de la tabla en la temporada pasada a una increíble racha de triunfos que los mantuvo varias fechas al tope.

Así, y contra las ridículas probabilidades de 5000 a 1 en las casas de apuestas que tenían al comienzo de la liga, mataron a todos los gigantes y consiguieron lo inesperado.

Los hinchas de toda una vida no lo pueden creer, tampoco el mundo del fútbol.

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