Según la organización, las manifestaciones convocaron cerca de 100 mil personas a nivel nacional.
Desde el comienzo de la marcha, a las 11:00 horas, hasta el final de la jornada, encapuchados nuevamente se enfrentaron a Carabineros, empañando las manifestaciones que estuvieron marcadas por las solicitudes de los estudiantes hacia el Gobierno, con un llamado a “cumplir las promesas” por la reforma educacional. Además, hubo mensajes de apoyo a la manifestación en Chiloé.
Los estudiantes convocados por la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), avanzaron desde Plaza Baquedano hasta la calle Echaurren, donde se finalizó con un pequeño acto. A su vez Carabineros, lanzó bombas lacrimógenas para disuadir a los manifestantes que terminaron por ocasionar daños estructurales al comercio y señaléticas en la vía pública.
En regiones también se desarrollaron marchas estudiantiles, pero sin registro de mayores incidentes.
desde la cúpula comunista, acusaron a la gestión del nuevo alcalde de Santiago, Mario Desbordes de "detener y afectar" el permiso para la realización del evento que estaba programado para el 4 y 5 de enero de 2025 en el Parque O'Higgins.
