La aplicación Freeform de Apple es una pizarra de trabajo colaborativo, donde profesores y alumnos pueden compartir sus ideas, repasar sus asignaturas y cambiar sus perspectivas sobre el uso de la tecnología. Según el profesor Hans Contreras, conocido en sus redes sociales como Profe Hans, la herramienta es "tan visualmente atractiva que a los niños les llama la atención" y les cambia "la perspectiva de una clase".
En diciembre de 2022, Apple lanzó la herramienta Freeform para sus sistemas operativos iOS, iPadOS y MacOS, buscando ofrecer un espacio flexible donde sus usuarios pueden organizar distintos tipos de contenidos, además de compartir y colaborar con otras personas.
La aplicación es una pizarra de trabajo colaborativo, entre los dispositivos de la compañía norteamericana, que es compatible con una gran variedad de archivos, como fotos, videos, audios, documentos, PDF, enlaces a sitios web, ubicaciones en el mapa, notas adhesivas, formas, diagramas y mucho más.
Además, se pueden insertar imágenes o documentos escaneados desde un iPhone o un iPad, directamente en el espacio de la app.
Uno de sus usos más comunes es en las salas de clases, donde profesores y alumnos pueden compartir sus ideas sin algún límite.
Este es el caso de Hans Contreras, conocido en redes sociales como Profe Hans, quien utiliza la herramienta con sus alumnos de 8 a 15 años en la Escuela Isla de Marchant de Curicó.
Al respecto, el “profe” aseguró que “la cantidad de cosas que uno puede hacer en la pizarra virtual de Freeform es increíble“.
“Yo trabajo en una escuela rural en donde hay poco internet, esa es una de las grandes problemáticas de los profesores en Chile. Hay tecnología, pero no está implementada en los colegios. A muchos colegios rurales no les llega bien el internet. Desde que ocupo Freeform, puedo utilizar mi teléfono, computador, iPad, sin tener internet. Que es algo súper importante”, dijo.
Con Freeform, “tienes una infinidad de animaciones, gráficas, líneas que puedes doblar, que puedes cambiar el color, tienes letras, es muy intuitivo, y eso es lo bueno también que tiene Apple”.
“Es tan visualmente atractivo que a los alumnos le llama la atención. Entonces, al ser visualmente atractivo, que es una de las principales cosas que uno debe hacer cuando hace clases, que es lo pictórico, lo que tiene que ver con la visual, ya está atractivo y hace que sea más fácil de trabajar tanto con niños como con uno mismo”, explicó el profesor.
Uso de la pizarra Freeform en un iPad. Archivo: Apple.
—¿En qué clases ocupas Freeform para enseñarle a los niños y niñas?
—Mira, lo ocupo transversalmente. Quiero decir que lo ocupo en todas las asignaturas. Obviamente, no todo el tiempo y a todas horas, pero por ejemplo, estoy trabajando en matemáticas, quiero hacer una suma, pongo 2 más 2 en la pizarra y a los niños les llama, de verdad, mucho más la atención cuando algo es digital. Si tú les muestras algo digital, ya les cambias la perspectiva que tienen hacia tu propia clase.
—Y con estas tecnologías, ¿tú crees que se está achicando un poco la brecha de aprendizaje? En relación con lo que tal vez pueda ocurrir acá en Santiago.
—Yo creo que sí, incluso uno de los grandes problemas de la educación en Chile es que siempre fue muy centralizada. Incluso la mayoría de los textos siempre vienen pensados en Santiago y se olvidan mucho de las diversas partes de Chile. La cosa es que uno de esos problemas es el acceso a tecnología. Pero hoy en día, el profesor mismo, yo mismo, accedimos a la tecnología y la llevamos a las salas de clases. Muchas veces la escuela no tiene los recursos para adquirir esto. Pero los profesores sí. Entonces eso sí ha cambiado la gran brecha que había, por ejemplo, con una capital. Hoy en día, sí o sí, es más fácil para un profesor eliminar esa brecha.
—¿Cómo ha mejorado también la concentración de los niños y niñas? Sobre todo que la mayoría, creo yo, de ellos vivieron dos años en pandemia, solo conectados en un computador. ¿Cómo ha mejorado con Freeform esa concentración?
—Mira, como te decía al principio, ya el hecho de ocupar un objeto tecnológico a los niños le cambia la perspectiva de una clase. Es como un incentivo aparte, porque es verdad, no puede uno dedicarle todo a una clase el uso de Freeform. Sería antiproducente. Pero sí en momentos claves. Yo creo que eso es súper importante, que el profesor no dependa de la tecnología, pues el profesor es quien debe dominarla y ver en los momentos exactos de los cuales ocuparla.
Experto en política estadounidense y ex subsecretario de Asuntos Hemisféricos de EE.UU., el cientista político chileno analiza las elecciones presidenciales y su impacto en la relación de EE.UU. con América Latina.
