El exdiputado del Partido Nacional conversó con Fernando Paulsen, en el marco del especial “CNN 50: Testimonios de la historia”. Pérez de Arce se refirió a la intención que Salvador Allende tenía de convocar a un plebiscito nacional en 1973, con el fin de destrabar la crisis. También afirmó que actualmente es “imposible” que exista una "salida" por la vía armada.
El exdiputado del Partido Nacional (PN) Hermógenes Pérez de Arce comentó que, previo al golpe de Estado de 1973, Salvador Allende le transmitió Augusto Pinochet su intención de convocar a un plebiscito nacional con el fin de destrabar la crisis.
En el marco de la conmemoración de los 50 años del golpe de Estado, CNN Chile emite una serie especial de entrevistas que abordan, desde la perspectiva de distintas figuras políticas, testimonios claves y análisis de las últimas décadas de la historia del país. El programa se llama CNN 50: Testimonios de la historia.
Pérez de Arce conversó con el periodista Fernando Paulsen sobre su experiencia y pensamiento en torno al quiebre democrático.
En la instancia, el exdiputado dio cuenta que “el 9 de septiembre (de 1973), un domingo, Salvador Allende convocó a Augusto Pinochet a su mansión de Tomás Moro. Le dijo ‘yo creo que esta situación está muy grave y voy a llamar a un plebiscito’ y Augusto Pinochet le dijo ‘yo creo que eso va a descomprimir mucho la situación’, y se fue a su casa”.
No obstante, “en la tarde, había un té donde estaba convidado Gustavo Leigh y llegó el almirante Huidobro con un papelito de José Toribio Merino que decía simplemente ‘Augusto y Gustavo, el Día D es el 11. La H son las 0600. La marina va a actuar. Les pido firmar al pie en conformidad con lo anterior y poner todas sus fuerzas a disposición de esta iniciativa. Si tienen objeciones o si no lo van a hacer, les ruego que me expliquen por escrito al anverso del papel’. Augusto y Gustavo firmaron“, agregó.
En ese sentido, el exparlamentario sostuvo que “si no hubiera llegado ese papelito, Pinochet se habría quedado con la actitud que tenía en la mañana (…) y habría seguido prologándose la situación quizás por cuánto tiempo”.
“Así sucedieron las cosas, hubo una persona que apretó el gatillo. Hubo otra persona que apretó el gatillo antes, que se llamaba Patricio Aylwin. Patricio Aylwin estaba en conversaciones con Salvador Allende, era presidente de la Democracia Cristiana, senador, pero al mismo tiempo él sabía que había 15 generales -cinco de cada rama- que se reunían para analizar la situación y tomar alguna decisión”, continuó.
El exdiputado manifestó que Aylwin “no quería hablar con ninguno de los 15”. Sin embargo, contactó “al hijo de Arellano, que era democratacristiano y tenía 18 años -Sergio Arellano Iturriaga- y le decía ‘mire Sergio, ya no va a haber más conversaciones con Salvador Allende. Quería comunicarle esto’. ¿Por qué el presidente de la Democracia Cristiana le comunica a un militante de 18 años que no va a haber más conversaciones con Allende? Porque Aylwin era astuto, sabía que no podía meterse en ninguna cosa rara”, añadió.
“Y él iba a y le decía a su padre: ya no hay más conversaciones. Entonces, el Grupo de los 15 decía ‘ya, vamos a tener que hacerlo’. No habían tomado todavía una decisión, pero eso pasó“, sentenció.
“En Chile la historia no se puede repetir”
En otro momento de la entrevista, Fernando Paulsen le consultó a Hermógenes Pérez de Arce si a su juicio la historia se podía volver a repetir, considerando que actualmente “las cosas están bien crispadas, por montones de razones que no necesariamente son todas políticas o incluso ideológicas”.
—En Chile la historia no se puede repetir. Primero, porque hay un mecanismo político que le da una salida a situación. En Chile el Senado puede por mayoría de votos declarar la incapacidad del presidente. Yo estoy seguro de que en una crisis lo harían. De hecho, yo soy partidario que lo hagan en esta situación, porque creo que Boric está destruyendo el país.
—¿Tú crees que Boric es una persona que está inhabilitada en términos de sus capacidades para gobernar el país?
—Desde luego. O sea, si hubiera tenido que pasar un examen de piloto, no lo habría pasado con las enfermedades que tiene, con el trastorno obsesivo compulsivo que tiene. Creo que hay una causal real, además, es una persona que carece de dotes fundamentales, pero eso no tiene la causal precisa que es incapacidad mental del presidente de la República.
Yo creo que aquí no hay posibilidad de salida militar, ninguna. Más que todo por el carácter que tienen las instituciones armadas actualmente, que como parte de la nacionalidad han comprado la versión de la izquierda y, por lo tanto, en el fondo repudian la acción de los militares de 1973, mayoritariamente. Los activos, me refiero.
Finalmente, el exdiputado reiteró que, a su juicio, la crisis política del país “tiene que resolverse por la vía electoral, y lo mejor sería que el presidente renunciara y se hagan nuevas elecciones presidenciales, y ahí se detendría el deterioro del país inmediatamente”.
“Habría un candidato que sería favorable el modelo económico social que ha representado el éxito de Chile, la calidad que perdimos de primer país de América Latina, y eso tiene que resolverse democráticamente en una elección. Ojalá fuera a fines de año“, sentenció.