"Parece estar escribiendo una Constitución mapuche, y no para todos los chilenos", fue una de las críticas a la Convención que realizó a su regreso el convencional Martín Arrau, uno de los que viajó hasta Europa. En Madrid hablaron con chilenos residentes y con los máximos representantes del partido considerado de ultraderecha por los principales medios españoles.
Una semana antes de las elecciones, haciendo uso de su semana territorial dentro de la Convención Constitucional, los convencionales del grupo Chile Libre, Rocío Cantuarias (Ind-Evópoli), Martín Arrau (UDI) y Teresa Marinovic (Ind-REP), viajaron a Madrid para reunirse con figuras de VOX, el partido considerado de ultraderecha por gran parte de la prensa española, que en septiembre propuso eliminar las comisiones de Igualdad y Derechos Sociales del Congreso de los Diputados.
Llamó la atención, de hecho, el paso de Marinovic por un programa de televisión español que comulga con su sector político, “El Gato al Agua”, perteneciente a El Toro TV. Allí, aprovechó de analizar el proceso constituyente y la realidad política del país, por ejemplo, negando las violaciones a los DD.HH. durante el estallido estallido social y calificando al indigenismo como “nicho de negocio”, entre otras cosas.
Ante las críticas de sus pares por no elegir visitar a sus respectivos distritos durante la mencionada semana territorial, los representantes decidieron profundizar en las razones para realizar el viaje en un comunicado oficial. Martín Arrau, sentenció que “votamos en contra de las semanas territoriales, viajamos con recursos propios y nos reunimos con chilenos residentes en el extranjero”.
“No veo cuál es el problema, sobre todo porque los hemos oído decir una y otra vez que la Convención debía tener en consideración a esos compatriotas”, añadió, dejando de lado a las personalidades políticas con las que compartieron.
Secundando dicho argumento, Cantuarias sostuvo que “viajamos porque es importante que los chilenos que residen en el extranjero sepan lo que realmente pasa en nuestro país”, agregando que “los resultados electorales de los que votan fuera muestran una profunda desconexión con lo que siente acá la mayoría, y si podemos hacer algo al respecto, lo vamos a hacer”.
En el texto, explicaron que, antes de comenzar su ronda de reuniones con VOX, los convencionales participaron de un encuentro coordinado por María Blanco, escritora que se identifica como “feminista contra las feministas”, en la Universidad CEU San Pablo. Al encuentro asistieron Cayetana Alvarez de Toledo y otros ex diputados del Partido Popular y Ciudadanos (centroderecha), como también empresarios y editores de distintos medios de comunicación.
Respecto a VOX, Marinovic afirmó que “es un partido que se desarrolló en un ambiente hostil: con una campaña de desprestigio muy agresiva de parte de los medios de comunicación, la izquierda e incluso la derecha española” y consignó que “hay que aprender de esa experiencia, porque estamos viviendo algo muy parecido“.
Iván Espinosa de los Monteros, diputado nacional de VOX por Madrid y portavoz del grupo parlamentario en el Congreso, y su esposa Rocío Monasterio, presidenta de VOX Madrid, fueron quienes recibieron a los convencionales del grupo Chile Libre.
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Si bien los convencionales afirmaron tener algunas diferencias con VOX, entre otras cosas, “porque las realidades de los ambos países no son idénticas”, aseguraron que “es fundamental hacer alianzas”. En ese sentido, Arrau fue quien manifestó que “hay dos problemas que ellos han enfrentado y que Chile también tiene: a tendencia a clasificar a los ciudadanos en primera y segunda categoría, que hemos visto de manera brutal en la convención, porque a ratos parece estar escribiendo una Constitución mapuche, y no para todos los chilenos”.
Finalmente, la segunda razón sería “el fenómeno de la inmigración descontrolada; Queríamos saber cómo creen ellos que hay que abordar este tipo de cuestiones que afectan tan profundamente a las personas”.
El más reciente movimiento de VOX en la materia tuvo lugar el pasado 10 de noviembre, cuando el presidente del partido, Santiago Abascal, presentó al Congreso una propuesta de ley para la reforma del Código Civil que elevaría de 10 a 15 años el tiempo mínimo de residencia legal y continuada en España para poder iniciar el expediente de concesión de la nacionalidad, que se prolonga habitualmente entre dos y tres años más. De esta manera, consignó El País, su plan es cuidar “como un tesoro la nacionalidad española” y no “regalársela a cualquiera”.
Las actividades están enmarcadas en el lema "Salgamos a jugar", por lo que el énfasis estará en los juegos tradicionales y la "transmisión intergeneracional de la riqueza cultural". La jornada se realizará en 16 regiones del país.
