El país sudamericano acumula 268.379 muertes y 11.122.429 contagios desde el inicio de la crisis sanitaria. Desde que comenzó la pandemia, el gobierno de Jair Bolsonaro a menospreciado a la enfermedad y sus números siguen aumentando en esta nueva ola.
(EFE) – Brasil, uno de los países más castigados por el COVID-19 en el mundo, registró en las últimas 24 horas 1.972 nuevas muertes por la enfermedad, un nuevo récord de víctimas diarias desde el inicio de la pandemia, así como 70.764 nuevos contagios, informó este martes el Ministerio de Salud.
De acuerdo con el boletín divulgado por la cartera, el número de fallecimientos de este martes supera el del miércoles de la semana pasada (1.910 víctimas), que era hasta ahora el día más letal desde inicio de la pandemia.
El número de contagios de este martes es el quinto mayor desde que el gigantes suramericano registró su primer caso de covid, el 26 de febrero del año pasado, aunque se ubicó muy por debajo del registrado el 7 de enero de este año (87.840 casos), hasta ahora el mayor.
Con el salto de los registros este martes, Brasil acumula 268.379 muertes y 11.122.429 contagios desde el inicio de la crisis sanitaria, que lo confirman como uno de los epicentros globales de la pandemia.
El recrudecimiento de la crisis este martes elevó el promedio de muertes en los últimos siete días hasta 1.573 diarias y la media de contagios en la última semana hasta 67.929 diarios. Ambas cifras constituyen también nuevos récords desde el inicio de la crisis sanitaria.
Los elevados promedios en los últimos días confirman a Brasil como el segundo país en número de fallecimientos por COVID-19 en el mundo, tan sólo superado por Estados Unidos, y como el tercero en número de contagios, por detrás de la nación norteamericana e India.
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Igualmente confirman que el gigante latinoamericano, con sus 210 millones de habitantes, sufre actualmente una nueva ola de la pandemia, más virulenta y letal, en parte provocada por la circulación de nuevas variantes del virus, entre ellas la variante brasileña que tuvo origen en la Amazonía.
Brasil registró en la última semana el período más mortífero desde el inicio de la crisis sanitaria: el número de fallecidos fue de 1.910 el miércoles, 1.699 el jueves, 1.800 el viernes, 1.555 el sábado, 1.086 el domingo, 987 el lunes y 1.972 este martes.
El boletín indica igualmente que la tasa de letalidad por COVID-19 en Brasil se mantuvo en el 2,4 % de la población, la de mortalidad en 127,7 óbitos por cada 100.000 habitantes y la de incidencia en 5.292,7 contagiados en la misma proporción poblacional.