Un concurso cuyos participantes están profundamente endeudados y juegan juegos de niños para ganar millones de dólares se convierte en una trampa mortal que solo terminará cuando uno gane. Esa es la premisa del thriller surcoreano que se convirtió en un éxito mundial y que se suma a historias con una profunda crítica social originadas en el mismo país, como la ganadora del Oscar, "Parasite".
El thriller de Corea del Sur El juego del calamar se transformó en el nuevo éxito de la plataforma Netflix, posicionándose como lo más visto desde su estreno el pasado 17 de septiembre. ¿Su historia? Se trata de un concurso cuyos participantes están profundamente endeudados y juegan juegos de niños para ganar una tonelada de dinero en efectivo. La desventaja, que no conocen, es que los perdedores morirán.
Su director, Hwang Dong-Hyuk (Silenced, Miracle Mile) detalló para CNN que el proyecto se planeó originalmente el año 2008, “pensamos que una serie de juegos de supervivencia con características más coreanas sería divertida”.
En tanto, la directora de arte, Chae Kyoung-Sung (Miss Granny), sostuvo que, estéticamente hablando, “creamos lugares y escenarios para que los espectadores piensen en las intenciones ocultas del Juego del calamar”.
En sus nueve episodios se llevan a cabo una serie de juegos, populares entre los niños coreanos en las décadas de los ’70 y ’80, en un inquietante escenario desconocido para sus participantes, quienes estarán encerrados hasta que haya un ganador.
Uno de sus protagonistas, el actor Lee Jung-Jae (New World), señaló sobre la experiencia de la filmación que “al entrar al set el primer día, estábamos ocupados tomando fotos, el set era casi de ensueño“. Otro de los actores, Wi Ha-Joon (18 Again), afirmó que “al leer el guion esperaba una imagen de los sets, pero los reales fueron completamente distintos”.
El fenómeno de la realización cinematográfica surcoreana se viene gestando con fuerza desde principios del siglo XX, entre películas y telenovelas, pero ha trascendido a una escala universal tras el éxito en los premios Óscar de Parasite (Bong Joon Ho) el año 2020, cuando ganó cuatro estatuillas, a Mejor Película, Mejor Director, Mejor Guion y Mejor Película Extranjera.
La cinta relataba, a modo de ficción y de forma brillante, una historia de diferencias sociales económicas, que impactó en todo el mundo. Ahora, “El juego del calamar” vuelve a atrapar a los espectadores con una crítica a una sociedad global atrapada en la carrera por el éxito.
Experto en política estadounidense y ex subsecretario de Asuntos Hemisféricos de EE.UU., el cientista político chileno analiza las elecciones presidenciales y su impacto en la relación de EE.UU. con América Latina.
