La directora de cine argentina Lucrecia Martel, quien es la presidenta del jurado de la competición oficial de la 76ª edición del Festival de Venecia, anunció este miércoles que no asistirá a la gala en la que se proyectará la película de Roman Polanski, este viernes 30, en solidaridad con las víctimas que han denunciado abuso sexual por parte del realizador.
“No voy a asistir a la gala de Polanski porque represento a muchas mujeres que estamos luchando en Argentina por cuestiones como ésta, no deseo ponerme de pie y aplaudir”, dijo Martel en la rueda de prensa inaugural del certamen.
Polanski, quien se encuentra con pedido de captura en Estados Unidos por la violación de una menor de edad en 1977, presentará la película J’accusse: el oficial y el espía, en la que dará su visión sobre el caso Dreyfus (un oficial francés de origen judío, al que acusaron de entregar documentos secretos a los alemanes).
Martel confesó que le ha resultado difícil tomar una decisión sobre su participación en este jurado y que ha tenido en cuenta la posición de la víctima, que actualmente considera que el caso está cerrado.
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“La presencia de Polanski [en el programa del festival] me resultó muy incómoda”, dijo. “Hice una pequeña investigación, con Internet, y consultando a escritoras que han tratado estos temas. Y vi que la víctima dio este caso por cerrado, no negando los hechos sino considerando que el señor Polanski había cumplido con lo que la familia y ella habían pedido”, agregó.
En 1977, Samantha Geimer denunció a Roman Polanski de haber abusado sexualmente de ella cuando tenía 13 años. Según relató, el director se reunió con ella para una sesión de fotos para la revista Vogue, pero todo terminó en un encuentro forzado donde Polanski la violó. Desde entonces, el director polaco nacido en Francia en 1933 no ha vuelto a Estados Unidos ni a ningún otro país donde pueda ser extraditado. En 2003 Geimer disculpó públicamente al realizador, sin negar los hechos ocurridos.
En septiembre de 2009, Polanski viajó al Festival de Cine de Zurich, donde se le rendiría una homenaje. Sin embargo, el director fue arrestado apenas llegó al país. Siete años después, en diciembre de 2016, el Tribunal Supremo de Polonia rechazó reabrir el caso de Polanski.
Consultada sobre cómo evaluará la cinta su par francés, Martel explicó que “no separo la obra del hombre, pero creo que su obra merece una oportunidad por las reflexiones que plantea”.
Por otra parte, a pesar de sus críticas contra el director de origen polaco y su presencia en la programación de Venecia, Lucrecia Martel aseguró que aceptó la presidencia del jurado “porque es un lugar político y este debate es muy importante en este festival”.
Además del caso de Samantha Geimer, otras tres mujeres han acusado a Roman Polanski de abuso sexual. Entre ellas, la actriz Charlotte Lewis declaró que en el rodaje de la película Piratas (1986) el director le habría dicho “si no eres lo suficientemente adulta como para tener relaciones conmigo, no lo eres tampoco para hacer una prueba de cámara”. De entonces 16 años, Lewis finalmente habría aceptado.
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