“Es desgarrador ver cómo se juzga a mi hijo no por la verdad, sino por una historia fabricada a partir de mentiras”, escribió Janice Combs en un comunicado compartido en redes sociales. Actualmente, el magnate de la música se encuentra bajo custodia federal, y a la espera de juicio por cargos de asociación delictiva, tráfico sexual y transporte para ejercer la prostitución.
(CNN) – Janice Small Combs salió en defensa de su hijo, Sean “Diddy” Combs.
El músico y productor se encuentra actualmente bajo custodia federal a la espera de juicio por su acusación en el Distrito Sur de Nueva York de cargos de asociación delictiva, tráfico sexual y transporte para ejercer la prostitución. Se ha declarado inocente.
Combs también se enfrenta a múltiples demandas civiles que le acusan de una serie de conductas sexuales inapropiadas y otras actividades ilegales.
Su madre, en tanto, hizo pública una declaración el domingo a través de su abogado. Esta fue compartida a través de redes sociales.
“Hoy me dirijo a ustedes como madre devastada y profundamente entristecida por las acusaciones vertidas contra mi hijo, Sean Combs”, comenzaba su declaración.
“Es desgarrador ver cómo se juzga a mi hijo no por la verdad, sino por una historia fabricada a partir de mentiras”, escribió. “Ser testigo de lo que parece un linchamiento público de mi hijo antes de que haya tenido la oportunidad de demostrar su inocencia es un dolor demasiado insoportable para expresarlo con palabras”.
El caso ha puesto de relieve el supuesto estilo de vida del magnate de la música, alejado de la vista pública.
En su acusación, los fiscales federales citaron los supuestos “Freak Offs”, el nombre que Sean Combs daba a las elaboradas actuaciones sexuales en las que se le acusa de drogar y coaccionar a las víctimas para que realizaran actos sexuales prolongados con trabajadores sexuales masculinos, a partir de 2009 aproximadamente.
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Janice Combs también se refirió al registro obtenido por CNN de una cámara de seguridad que mostraba a Sean Combs agrediendo a su entonces novia, la cantante Cassie Ventura, en 2016 en un hotel de Los Ángeles.
“Puede que mi hijo no haya sido del todo sincero sobre ciertas cosas, como negar haber sido violento con una exnovia cuando la vigilancia del hotel mostraba lo contrario”, escribió en su declaración.
“A veces, la verdad y la mentira se entrelazan tan estrechamente que resulta aterrador admitir una parte de la historia, sobre todo cuando esa verdad se sale de la norma o es demasiado complicada para ser creída”, agregó.
En un inicio, Sean Combs negó las acusaciones de abusar físicamente de Ventura, incluidas en una demanda que ella presentó antes de que se hiciera público el video. Tras su publicación, pidió disculpas.
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“Estaba molesto en ese entonces, cuando lo hice, y lo estoy ahora. Fui y busqué ayuda profesional. Empecé a ir a terapia, a rehabilitación”, dijo Combs en un video compartido en las redes sociales días después de la difusión del video.
“Tuve que pedir a Dios su misericordia y su gracia. Lo siento mucho. Pero me comprometo a ser un hombre mejor cada día. No estoy pidiendo su perdón. Lo siento de verdad”.
Su madre escribió que cree que el equipo jurídico civil de su hijo “optó por llegar a un acuerdo en la demanda de su exnovia en lugar de impugnarla hasta el final, lo que provocó un efecto rebote, ya que el gobierno federal utilizó esta decisión contra mi hijo, interpretándola como una admisión de culpabilidad”.
“Es importante reconocer que ninguno de nosotros, independientemente de nuestro estatus, es inmune al miedo o a los errores”, escribió. “No ser totalmente sincero sobre una cuestión no significa que mi hijo sea culpable de las repulsivas acusaciones y los graves cargos que se le imputan”.
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La semana pasada, el abogado Tony Buzbee, con sede en Houston, y el AVA Law Group, anunciaron que habían sido contratados por al menos otros 120 hombres y mujeres “para presentar demandas ante los tribunales civiles” contra Combs.
CNN contactó con los abogados de Combs para obtener comentarios sobre la declaración de su madre.