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Young Cister en Viña 2024: El ícono urbano que derroca prejuicios y usa la fama para cambiarle la vida a su familia

Por Camila Morandé

29.02.2024 / 11:50

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Nacido en Conchalí y criado en Quilicura, Young Cister -cuyo verdadero nombre es Esteban Cisterna- tiene 27 años y un talento con gran influencia en la nueva explosión urbana a nivel local. Este año, debutará en la Quinta Vergara con la misión de cerrar una jornada que marcará el regreso de la reconocida "noche chilena" a Viña 2024. Conócelo en esta nota.


Young Cister debutará en Viña 2024.

El compositor, cantante y productor nacional de 27 años, tendrá la misión de cerrar lo que contemplará el regreso de ‘la noche chilena‘ al festival.

Antes de él, Los Bunkers abrirán el telón con sus clásicos del rock y les seguirá Sergio Freire en el segmento humorístico.

Tuvo parte en la consolidación de la escena urbana actual en Chile y su influencia se refleja en la co-producción de éxitos iniciales del género como Pablo, de Pablo Chill-E (2016) y Siempre triste, de Gianluca (2017).

Hoy, se sube a la Quinta Vergara por segundo año consecutivo -en la edición pasada, participó en la actuación de la argentina Nicki Nicole-, pero con el debut de un show propio.

En esta nota, podrás conocer más acerca de la voz tras éxitos como LA TERAPIA, Casi Amor De Verano, Algo De Ti y OH LA LA.

De cara al prejuicio

Pese a que su adolescencia e inicios musicales tienen orígenes en Quilicura, lo marcó haber vivido en la población La Palmilla, de Conchalí, donde nació y vivió hasta los cinco años. Su familia decidió cambiarse de comuna por razones de seguridad.

“Es una realidad muy distinta a la que uno puede ver en otros sectores de Santiago o en otros sectores de Chile”, explicó durante una entrevista en 2018. “Salimos de Conchalí porque estaba brígido”.

Su inicio en la música despegó a los cuatro años, cuando, embelesado por la batería que veía en la iglesia que frecuentaba, decidió aprender a tocarla. Conforme pasó el tiempo, exploró ritmos en un viejo teclado Casio de su padre y formó una banda con vecinos del barrio.

Sin un mentor específico, forjó su propio camino, puliendo rimas y creando beats en la intimidad de su habitación. Su sed de conocimiento lo llevó a investigar y descubrir nuevos artistas, utilizando la tecnología disponible para expandir sus horizontes musicales.

Pero en la música urbana hay prejuicios. Al ser consultado sobre su opinión al respecto, reflexiona: “Siento que lo enfrenté de la mejor forma posible, demostrándole a esas personas que no por ser del barrio y venir desde abajo uno va a ser una persona mal educada o sin valores”.

Resalta el hecho de que, a través de entrevistas y permitiendo que la gente lo conozca más a fondo, ha logrado cambiar la percepción inicial de quienes emiten juicios negativos sin conocerlo.

Hace hincapié en la importancia de educar a la sociedad sobre la diversidad de experiencias y la individualidad de cada persona, independientemente de su origen o género musical.

“Gracias a Dios, mis papás me educaron muy bien. En la casa siempre fue primordial el respeto a los demás y fue lo mejor para enfrentar los prejuicios. Porque, al no conocerte, hablan mal de uno, pero cuando te conocen y te escuchan en las entrevistas, cambia la percepción”, señala.

Dejar la universidad por un sueño

Uno de los rasgos que más lo caracterizó durante la infancia y adolescencia fue el ser un alumno aplicado. Durante la etapa escolar, mantuvo un alto desempeño académico que sentó las bases para que, más tarde, pudiera ingresar a una institución prestigiosa.

Tras lograr ser seleccionado en la Universidad de Santiago, se matriculó en publicidad. Y aunque mantuvo un rendimiento igual de sobresaliente que en el colegio, podía darse cuenta que no era lo suyo.

“Me iba súper bien. Me gustaba, pero no era algo que yo quería para mi vida. Yo quería cantar, estar frente a gente y mostrarle mi arte, lo que yo hago cuando estoy en el estudio”, explicó en 2022.

Enfrentar lo que sentía y hacer algo al respecto fue duro. Cuando tomó la decisión de desertar, ya había completado dos años de carrera.

“Fue una decisión difícil. Pero ya no aguantaba más. Mi mente no daba más, tampoco, de la ansiedad. En ese tiempo pasé por un proceso de depresión fuerte“, recordó.

Devoción por su madre: “El dinero que yo quiero ganar de la música es para ayudarla a ella”

Reconoce con orgullo que su familia es el pilar fundamental de su vida y describe como “mágica” la relación que mantiene con su madre.

“Es sólo pararme en frente de ella y ya no necesito decirle nada, ya sabe. Es algo como de su naturaleza. La amo mucho“.

El cercano vínculo madre-hijo que mantienen le ha inspirado a escribir éxitos como Perdón Madre (2017) y Ay Dime (2021).

“Me gusta expresarme hacia ella, porque ella es lo que me mueve en mi día a día. Es como mi motivación. El dinero que yo quiero ganar de la música es para ayudarla a ella, para levantar a mi familia, ayudarla”, expresó.

En 2023, logró cosechar frutos de su ardua siembra artística y a través de sus redes sociales, hizo público haber concretado uno de sus primeros sueños: comprar una casa nueva a su madre.

“Lo logramos como te lo dije, mamita; que los iba a sacar del barrio”, escribió en el pie de foto.

Créditos: Instagram | @youngcister

Su desconocido paso por el fútbol

De niño, intentó probarse en varios clubes, entre los que se incluyeron Unión Española y el cuadro del que es ferviente seguidor: Universidad de Chile. Sin embargo, nunca logró recibir un sí.

“Está bien, si no era tan bueno, tampoco. Pero me encantaba el fútbol“, le admitió a Mauricio Pinilla en el programa Fuera del área.

También atribuye las negativas a la poca contextura física, pues en aquella época, solía ser muy delgado. “Hacía goles, pero no tenía fuerza“, reflexionó.

Su pasión por el deporte también la lleva retratada en el cuerpo: en uno de sus brazos, se tatuó la camiseta de Ronaldinho.