"El retiro de las medidas de apoyo relacionadas con la pandemia y las estrictas condiciones monetarias frenarán el consumo y la inversión durante 2023, pero estos efectos deberían disminuir a principios de 2024", explicó el organismo internacional.
(EFE) – La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) mejoró este miércoles sus perspectivas sobre Chile y proyectó una contracción de la economía del 0,1% para 2023, frente al 0,9% estimado en noviembre pasado.
Para 2024, la OCDE prevé un crecimiento del producto interior bruto (PIB) del 1,9%.
“El retiro de las medidas de apoyo relacionadas con la pandemia y las estrictas condiciones monetarias frenarán el consumo y la inversión durante 2023, pero estos efectos deberían disminuir a principios de 2024“, explicó el organismo internacional, con sede en París (Francia).
La organización, a la que Chile se adhirió en 2010, anticipó asimismo que “la inflación seguirá reduciéndose a lo largo de 2023 y volverá a la meta a finales de 2024“.
La economía chilena se recuperó más rápido de lo esperado tras la pandemia, con un aumento histórico de 11,7% en 2021, pero en 2022 comenzó a ralentizarse y creció solo un 2,4%.
La inflación, sin embargo, se disparó y el año pasado alcanzó el 12,8%, la mayor cifra en tres décadas.
Entre los riesgos que podrían afectar a la economía chilena, la OCDE señaló la larga y severa sequía que afecta al país desde hace una década y que podría limitar la actividad minera en el principal productor de cobre del mundo, así como un hipotético nuevo fracaso del proceso constituyente en el que está inmerso Chile.
“La falta de aprobación de una nueva Constitución y la falta de claridad sobre el futuro de la reforma fiscal podría aumentar la incertidumbre política, perjudicando la confianza de las empresas y los consumidores y lo que conduce a un consumo y una inversión lentos“, indicó el organismo.
Espaldarazo a la reforma tributaria
Al igual que hizo en septiembre del año pasado, la OCDE volvió a dar un espaldarazo a la reforma tributaria que impulsa el Gobierno del presidente Gabriel Boric para financiar algunas de sus reformas clave en salud, educación, pensiones y seguridad.
La recaudación tributaria en Chile supuso el 19,3% del PIB en 2020, muy por debajo del promedio en Latinoamérica (21,9%) y de los países que integran la OCDE (33,5%).
“Las mejoras en los programas sociales y la infraestructura requerirían recaudar más ingresos, a través de un sistema fiscal más progresivo“, afirmó el organismo.