Durante la última década, la vida de la rubia dio un giro. Participó en múltiples programas, se casó, tuvo una hija, ahondó en la numerología y confesó diversos episodios de su vida amorosa. Acá revisamos, año por año, las principales situaciones por las cuales hizo noticia en el mundo de la farándula.
“Todos los años en enero me voy a Punta del Este y es probable que esta vez me acompañe Nabih”.
Esas fueron las declaraciones de María Eugenia Larraín justo antes de comenzar la década del 2010.
Desde esas palabras hasta hoy, la vida de Kenita dio un giro en 180 grados. En estos últimos 10 años, la ex modelo participó en realitys, incursionó en la música, formó una familia, se perfeccionó en la numerología y reveló desconocidos episodios de su vida amorosa.
A continuación, algunos de los momentos que marcaron la década de Kenita Larraín.
Tras un encierro de cinco meses por el reality Pelotón, donde obtuvo el segundo lugar de la competencia, Kenita decidió comenzar los primeros días de la nueva década en Punta del Este, Uruguay.
Si bien había declarado que en el viaje la acompañaría Nabih Chadud, quien fue su pareja en el encierro, la rubia anunció el término de la relación durante los primeros días de enero.
Durante ese año, fue participante del programa Fiebre de Baile 3 de Chilevisión, donde fue séptima eliminada. Luego participó en La Barra del Mundial de TVN durante la copa del mundo de Sudáfrica y, posteriormente, ingresó Pelotón para su quinta temporada. Fue en ese reality cuando comenzó una relación con Kike Acuña.
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El inicio de 2011 fue controvertido para la ingeniera comercial. En los primeros días de enero el Primer Tribunal de Garantía de Santiago despachó una orden de detención contra Rocío Marengo, quien enfrentó un juicio por injurias contra Larraín tras haber afirmado que “Kenita tiene más novios por mes que todo Chile junto”.
Dos meses después, María Eugenia decidió retirar la demanda luego que la argentina le pidiera disculpas.
Luego, y más allá de su vida ligada a la farándula, decide incursionar en el mundo musical y lanza su tema Es mi mundo sin ti, un cover de la cantante española Soraya Arnelas.
Incluso, debutó como cantante ante más de 13 mil personas en Iquique durante la gira de la Teletón de ese año.
A 8 años de la cancelación del matrimonio con Iván Zamorano, Kenita rompió el silencio y en un programa de televisión reveló que sufrió violencia física y emocional por parte de Bam Bam.
“(La violencia) fue de un nivel que sentí que con esta persona no me puedo casar (…) Una persona que no me quería”, dijo.
A las semanas, la rubia estuvo presente en la gala de Viña, sin embargo, fue pifiada por el público.
En marzo, dejó todo atrás y se fue a Perú para ser parte del reality La casa de Magaly. Pese a que en un principio se planteó desafíos televisivos fuera de Chile, finalmente regresó a nuestro país.
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Durante ese año, se destapó una relación que dio de qué hablar por mucho tiempo en la farándula. Los periodistas Cecilia Gutiérrez y Cristián Farías, quienes escribieron la biografía La verdadera historia, revelaron que Kenita tuvo un romance secreto con Felipe Camiroaga durante siete años. Incluso, indicaron que ella le regaló un caballo y un perro al animador.
“Felipe fue y será muy importante para mí”, fueron sus escuetas palabras tras destaparse el romance.
Tras coronarse como reina de La Pampilla, la rubia decide ingresar al reality Trepadores, el que en noviembre fue cancelado por los malos resultados de rating.
Tras años en el rubro, Kenita decidió alejarse de los realitys y comenzó a hacer público uno de sus ámbitos más espirituales: La numerología.
Por años estudió esta materia y, por lo mismo, decidió autodenominarse Kenita Bo.
“En mi caso, (la numerología) fue una gran revelación en darme cuenta cuáles son mis fortalezas, mis debilidades, los karmas, y todo aquello que iba cambiando las formas en que te iban pasando, pero que al final el fondo era el mismo. Me ayudó a crecer”, afirmó en esa oportunidad.
Durante gran parte de ese año, estuvo como invitada en distintos programas de televisión para realizar predicciones y entregar consejos mediante esta práctica.
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En junio de ese año, Kenita se casó en secreto por el civil con su actual pareja, el empresario argentino Sergio Fabián Ader.
María Eugenia había trabajado como modelo para una tienda del trasandino y llevaban cerca de un año cuando contrajeron matrimonio.
Ya en octubre, dio el sí en el matrimonio religioso que se realizó en el Arrayán. Fueron 120 invitados a la ceremonia, la que se concretó bajo un completo hermetismo.
“Con mi marido amamos la naturaleza y la ceremonia fue al lado del río, así que estábamos muy contentos. Por eso elegimos ese lugar mágico. No me hubiese gustado tener prensa en la llegada (al matrimonio) porque uno ya está nerviosa por la relevancia que esto tiene para nosotros y para nuestra familia”, afirmó.
El año lo comenzó dando sorpresas. En enero reveló que tenía seis meses de embarazo y que estaba esperando a una niña.
Incluso, en la gala de Viña de ese año, la modelo apareció luciendo su embarazo por la alfombra roja. En la oportunidad, desfiló acompañada de Mario, su hermano mellizo.
Dos meses después, dio a luz a Sophia, a quien presentó públicamente en agosto, y de forma exclusiva, en el programa Primer Plano.
En la entrevista, afirmó que junto a su pareja realizaron un ritual y enterraron la placenta “para devolverla a la tierra”.
“Dimos las gracias porque nutrió a mi guagüita. Piensa que la placenta es su primera casa, su primer nido”, indicó.
Durante ese año siguió con sus predicciones de la mano de la numerología.
En otro ámbito, en entrevista con Primer Plano decidió contar algo que, hasta ese entonces, ningún medio farandulero sabía.
“Cuando terminé la relación con Iván, Carlos Moya me escribió e invitó a España y viajé”, confesó María Eugenia.
Inmediatamente, aclaró que el ex tenista estaba soltero y que la “invitó como amigo”.
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Se publica el libro Rubia de ojos celestes: la biografía no autorizada de Kenita Larraín, escrito por Sergio Marabolí.
En el escrito, se detalla acontecimientos de la vida de la rubia y profundiza sobre sus relaciones amorosas como, por ejemplo, su pololeo con Zamorano y la especial cercanía que tuvo con Luis Miguel.
No obstante, tras la publicación del libro, Kenita finalmente reveló la relación que tuvo con Camiroaga.
“Empezó con los besos y qué se yo, pero eso fue en el matinal que, Felipe jugando, una vez me dio unos besos en la boca y hacía como que no me conocía, y era un juego. Pero no fue cuando estaba pololeando con Paz Bascuñán, en honor a la verdad (…) Porque nosotros no siempre fuimos pareja. Hubo momentos en que fuimos muy amigos también. Fueron muchos años”, recordó.
Larraín también contó una dura situación que estaba viviendo a nivel personal, ya que fue diagnosticada con la enfermedad de Hashimoto y que debido a esto no podrá tener más hijos.
En el ámbito personal, la numeróloga cierra la década feliz con su familia. En Instagram ha subido momentos junto a ellos, como cuando se disfrazó de Elsa para el cumpleaños de su hija o cuando su esposo la sorprendió para su cumpleaños 46.
En lo profesional, sumó proyectos en la televisión. Estuvo como panelista en un espacio en La Cuarta durante Viña.
Luego, tras un viaje a Egipto, fue panelista en Así Somos y en octubre fue presentada como animadora del late Muy Buenas Noches de Telecanal.
“Me encanta tener la libertad de hacer cosas distintas. He hecho cosas tan diferentes como animar programas, estar en un matinal, estar en Bailando Por Un Sueño con Marcelo Tinelli en Argentina, hacer una telenovela en Perú… Eso me encanta”, afirmó en El Dínamo, donde dio una de sus últimas entrevistas de la década.
La periodista de CNN Chile agradeció la distinción y recordó la trayectoria de Correa, quien es recordada como la entrevistadora más importante de la historia de Chile.
