La conductora de CNN Chile Radio reflexionó sobre la situación del partido tras la renuncia de la última diputada que les quedaba, Karen Medina.
El Partido de la Gente se quedó sin gente. Ayer renunció la última diputada que les quedaba de los seis diputados que eligieron a fines del 2021.
Karen Medina aseveró que Franco Parisi carece de la experiencia, la educación y la clase necesarias para liderar con integridad y respeto hacia todos los ciudadanos.
Estaba molesta por el apoyo que el partido le había dado a Felipe Cruz, el violento concejal de Recoleta que arremetió contra la secretaria general de Renovación Nacional. Aunque el PDG luego retiró ese apoyo, ya era demasiado tarde.
Como en la canción de los perritos, primero se fueron Giovanna Ahumada, Víctor Pino y Roberto Arroyo, entre otras cosas, por los insultos que recibieron de parte de Gaspar Rivas. No habían cumplido un año en la bancada del PDG.
En abril de este año, Rubén Oyarzo acusó que no había un proyecto político y dejó la colectividad. Al histriónico e impredecible Gaspar Rivas lo echaron por pactar con el Partido Comunista a la mesa de la Cámara de Diputados y ahora Karen Medina cierra por fuera.
A Franco Parisi, el candidato remoto, el deudor de pensión de alimentos que encabezó una campaña presidencial desde Estados Unidos, parece habérsele acabado la suerte. Su innovador partido, que en algún momento fue grito y plata reclutando a gente común y corriente y estimulando la participación digital, hoy no es más que una cáscara vacía.
El uso instrumental que le dio (al partido) para impulsar su propia figura y el culto a su persona se acabó. Veremos qué plan traza ahora para sobrevivir porque en política no hay muertos, como se dice.
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