El periodista de CNN Deportes subrayó la importancia de separar la política de la ideología, advirtiendo que esta situación generará una "tremenda carga social" para la deportista, quien ha sido víctima al cuestionar su género.
Esta tarde, el COI ha debido salir a explicar el hecho de que la boxeadora argelina Imane Khelif es biológicamente mujer y la propia contendiente italiana, hablamos de Angela Carini, ha ofrecido disculpas a la deportista a quien trató de ella por todo lo que causó su retiro en la jornada de este jueves.
Lamentablemente, algo tan puro y transparente como es el deporte también se ha visto trastocado por aspectos políticos y hasta ideológicos.
Bastó que por redes sociales se difundiera la noticia falsa de que la deportista argelina era una mujer trans para que de inmediato hasta líderes políticos y presidentes de naciones se colgaran de este bulo. Un bulo que no solamente está desmentido por el Comité Olímpico, sino también por la ciencia, ya que la chica Khelif, argelina, padece una condición de hiperandrogenismo que le hace perder las características sexuales secundarias.
Encima de esto, su condición también implica de que en algunos exámenes puedan confundir su género, a pesar de que ella es biológicamente mujer. Distinto es el contexto de llegar a la discusión respecto a si esta alza de testosterona le entrega o no una ventaja deportiva.
Pero ella hoy día va a tener que seguir en París 2024 compitiendo, de hecho lo va a hacer este día sábado, con un tremendo, una tremenda carga social a partir de la denostación de la cual ha sido víctima, dudando de su género, dudando de que fuera verdaderamente una mujer.
Frente a esto, la recomendación es muy simple. Tener una posibilidad de atenerse a los hechos y siempre refrendar cualquier información que aparezca en redes sociales.
No podemos hacer política, no puede vencer la ideología a costa del daño personal que se le haga a un atleta. Imane Khelif, la argelina, es mujer. Y es mujer también porque este país castiga duramente la homosexualidad.
No hay trans que puedan hacer su vida normalmente. Y bajo este contexto, y asumiendo de que su religión es el islam y por ella se rigen, es imposible que el comité olímpico argelino haya enviado a una mujer trans a una competición.
En París 2024 no hay mujeres trans. Todo lo que se dijo durante el día jueves estaba de repleto de mentiras y verdades a medias y sin embargo, el daño que se le ha producido a esta mujer, a Imane Khelif y a su participación deportiva va a trascender lo que ocurra en París 2024.
Esta nueva apuesta, además de buscar perfilar lo que serán los debates que marcarán al país en las semanas previas a los comicios de gobernadores regionales y alcaldes, busca responder a la inquietud de nuestros televidentes que han solicitado que el programa se presente más temprano.
