Por Fernando Paulsen

19.06.2024 / 10:10

El conductor de CNN Chile Radio aprovechó su espacio en Cuestión de Opinión para hacer un paralelismo entre el ecosistema político del país y el concepto de "modernidad líquida" postulado por el filósofo Zygmunt Bauman.


El filósofo y sociólogo Zygmunt Bauman creó un concepto que él denominó “modernidad líquida” para entender ese comportamiento humano que hoy cambia de ideas y conductas permanentemente. Un día cree una cosa, luego en otra. Vota por un sector político, luego por su tendencia contraria. Los lazos entre personas son más efímeros y frágiles. Amigos hoy; mañana, veremos.

Lo sólido funciona sobre bases más estables y continuas. Lo líquido se mueve, se adapta a nuevas situaciones, a distintos tipos de terreno y está siempre en constante movimiento. Renovarse, adaptarse, incluso renegar del pasado y cambiar súbitamente de ideas pasa, según Bauman, a ser lo definitivo de la humanidad.

La metáfora de la vida líquida, del cambio permanente, puede generar incertidumbre, pero le da a uno la posibilidad de ubicarse donde más le convenga, sin complejos ni vergüenza. Como dice Bauman, se trata del paraíso de la individualidad, buscando estímulos de paso que no alcanzan a convertirse en convicciones, cuando son campeados por otras ideas al alcance de la mano.

Así, parece, ha nacido la política líquida. El que pensaba así, ahora piensa asá. Se hizo realidad el chiste de Groucho Marx, cuando dijo, ‘estos son mis principios y si no le gustan, tengo también estos otros’.