El empresario aseguró que volvió a Chile en dictadura cuando le devolvieron sus empresas expropiadas en la UP, pero dijo que "reconocí el problema de los DD.HH., y eso es lo que le falta a la derecha".
En conversación con Marca Registrada, el miembro del directorio Fundación Museo de la Memoria, Daniel Platovsky, acusó una falta de conocimiento transversal de lo que significa este recinto.
Todo ello tras los cuestionamientos de parte de sectores de la derecha que han pedido contar “la historia completa”.
“Hay un concepto equivocado. Hay muchos que hablan de por qué no se ponen ahí las dos verdades. No existen dos verdades. Las violaciones a los Derechos Humanos la hacen los estados, no las personas”, sostuvo.
En esa línea, puntualizó que el Museo de la Memoria “no es un museo de historia (…) lo que hace es hacerle ver a la sociedad lo que ocurrió en materia de DD.HH. en un período acotado”.
Platovsky criticó las declaraciones del ex ministro de las Culturas, Mauricio Rojas, quien estuvo cuatro días en su cargo y abandonó el gabinete en medio de cuestionamientos por sus dichos sobre el Museo de la Memoria.
“El comentario que hizo respecto a que es un montaje es una vergüenza y una ofensa, no solamente al museo, a todos. Es no entender lo que ahí se expone y lo que representa”, explicó.
Con todo, valoró la decisión del Presidente Piñera de alejarlo del equipo ministerial teniendo en consideración la cercanía que hay entre ambos.
“Yo me fui el 70 de Chile porque nos expropiaron las empresas en el régimen de la Unidad Popular, y nos fuimos, tuvimos que autoexiliarnos. Volví a Chile el ’75 cuando nos devolvieron las empresas después del golpe militar y, obviamente, yo también era, desde ese punto de vista, un agradecido de los militares, pero después cuando vino la Comisión Rettig y comenzamos a conocer lo que pasó, es ahí donde incluso mi padre me dijo ‘nunca te olvides que cuando el Estado se organiza para asesinar personas, es el fin de la sociedad. Es el fin de la humanidad'”.
Consultado sobre su actitud durante este período, el miembro del directorio sostuvo que “probablemente (no quise ver), o no entendí los mensajes, o no quise ver”.
“Fui parte quizás de los cómplices pasivos. Lo quiero reconocer, porque me siento libre de eso ya, porque me di cuenta y reconocí el problema de los DD.HH., y eso es lo que le falta al resto de la derecha, reconocerlo. No duele, al contrario, ayuda”, explicó Platovsky llamando a ese sector a pronunciarse.
Las actividades están enmarcadas en el lema "Salgamos a jugar", por lo que el énfasis estará en los juegos tradicionales y la "transmisión intergeneracional de la riqueza cultural". La jornada se realizará en 16 regiones del país.
