Eduardo Vergara cuestionó la utilidad del plan presentado por el presidente Piñera y afirmó que "los niños chilenos no son comparables a los niños de Islandia" producto de la realidad de sus padres.
El director ejecutivo de la fundación Chile 21 y ex jefe nacional de Seguridad Pública del Ministerio del Interior, Eduardo Vergara, criticó las presentación del plan Elige Vivir Sin Drogas y afirmó que “no es posible que nuestros niños decidan elegir vivir sin drogas”.
“Si miras el anuncio del presidente Piñera y esto se tratase de una serie de Netflix, se llamaría ‘El populismo de la mano dura y el control’. El primer capítulo es Aula Segura, el segundo el control preventivo de identidad a menores, y el tercero es elige vivir sin drogas”, comentó el experto.
Entre sus motivos está que “los niños chilenos no son comparables a los niños de Islandia”. Vergara explicó que “uno de los pilares centrales del programa Elige Vivir Sin Drogas, que nace en Islandia y se replica en 21 países europeos, es que la familia juega un rol central. Vivimos en un país donde la mujer que se levanta en Pudahuel para trabajar en el barrio alto, se tiene que levantar a oscuras en la mañana para trabajar sin poder ver su hijo y cuando vuelve y ya está oscuro, el hijo está durmiendo”.
“Esa idea romántica de que llegan a la casa y en la mesa está puesta la once, no aplica en la mayoría de estos niños vulnerables, porque arriba de la mesa hay paquetes de pasta base y les tocan el timbre cada 15 minutos para vender droga“, dijo.
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El ex jefe nacional de Seguridad Pública también apuntó al monto destinado a la iniciativa: $500 millones para 44 comunas. “¿Sabes lo que haces con $500 millones cuando hay 360 mil niños excluidos del sistema escolar? Significa que la inversión en cada uno es de $1.300. Una burla tratar de hacer lo que el Senda no ha hecho en años con un presupuesto de $69 mil millones”, indicó Vergara.
Por otro lado, sostuvo que consumo, que en Chile está por sobre el 30%, es mucho mayor al de Islandia cuando se implementó el programa, “y lo que más redujeron es el consumo de alcohol, no el consumo de cannabis. Todos están obsesionados con los pitos hoy en día, siendo que tenemos problemas de pasta base en los más vulnerables y el problema generalizado de consumo de alcohol“.
“Tenemos que avanzar en un debate regulatorio, y no significa legalización y despenalización como se conoce, sino que reglas claras. Hoy en día las reglas las pone el crimen organizado y el delincuente“, afirmó.
Experto en política estadounidense y ex subsecretario de Asuntos Hemisféricos de EE.UU., el cientista político chileno analiza las elecciones presidenciales y su impacto en la relación de EE.UU. con América Latina.
