Mónica Rincón: “Salvar TVN requiere que los políticos estén dispuestos a perder poder”
Por Mónica Rincón
29.11.2018 / 20:50
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Este jueves se realizaron 80 nuevos despedidos en Televisión Nacional de Chile. Sobre esta crisis la conductora de Marca Registrada, Mónica Rincón, realiza su editorial.
80 familias pierden hoy sus fuentes de trabajo en Televisión Nacional. Porque hay 80 nuevos despidos. Es un día triste.
En medio de una industria en crisis, tener que llegar a este punto es responsabilidad de muchos, por cierto entre otros de varios ejecutivos. Seguro que hay mucho que mejorar en gestión, programación y otras áreas. Pero lo curioso es que los políticos no hacen ningún mea culpa.
Y sería bueno que recordaran que con más o menos intensidad todos los gobiernos y muchos parlamentarios han caído en la tentación de pretender que TVN sea caja de resonancia de sus políticas públicas, que no es el rol de un canal independiente. A eso se han resistido con dignidad quienes trabajan en prensa: flanco principal de las presiones.
La crisis de TVN es imposible entenderla sin analizar el cuoteo de su directorio, donde, aunque ha habido personas capaces, no ha sido esa capacidad, sino su filiación política, lo que más pesó para designarlos.
Y aún así Televisión Nacional ha sido cuna o vitrina de programas notables. Aún así su departamento de Prensa ha hecho notables coberturas, y denuncias tremendamente relevantes: Karadima, escándalos de corrupción en las FFAA, fiscalización parlamentaria, caso Frei o los tentáculos del narco en el municipio de San Ramón.
Mientras tuvo alta sintonía, la televisión pública resultaba útil y además gozaba de una fortaleza que la hacía de alguna manera inmune. Hoy las cosas han cambiado y las críticas abundan.
Pero sin tener siempre a los mejores dirigiendo TVN, sin estar dispuestos a que desde esa televisión pública se fiscalice sin cortapizas al poder de toda clase, no hay futuro posible para la Televisión Pública.
Si un día se cierra, nuestra democracia será más pobre porque habremos pedido EL medio que no es de un privado. Y ahí, transversalmente, la clase política será también responsable.
Salvar TVN requiere, entonces, entre otras cosas, que los políticos estén dispuestos a perder poder.
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