Mauricio Pulgar aseguró que Duarte tiene "muchas influencias" y que "se negó permanentemente" a atender su denuncia por violación contra Humberto Enríquez.
El ex seminarista Mauricio Pulgar denunció redes de sexo, drogas y poder en la Diósesis de Valparaíso, y apuntó en contra del obispo Gonzalo Duarte.
Pulgar estuvo en CNN Chile, donde abordó su denuncia contra el presbítero Humberto Enríquez, sobre quien asegura que lo drogó y lo violó cuando estaba en la Diócesis de San Felipe.
“Él me drogó y yo no pude moverme (…) no me acuerdo de nada, salvo que empecé a sentir un jadeo y era que él estaba ejecutando la violación“, contó el ex seminarista, y sostuvo que tiene un audio en el que “Humberto Enríquez confiesa la violación”.
Otra víctima, Marcelo Soto, ya había denunciado a Enríquez por abuso sexual, sin embargo, los representantes de la iglesia no le creyeron. Actualmente no se le permite ejercer como párroco pero no ha sido condenado por la Iglesia Católica.
“Gonzalo Duarte lo ayudó y le dio el permiso para poder trabajar en la Diócesis de San Felipe”, afirmó Mario Pulgar. Aseguró, además, que después de la violación: “pedí hablar con Gonzalo Duarte pero su secretario Gonzalo Bravo lo impidió y Duarte se negó permanentemente”.
“Gonzalo Duarte tiene muchas influencias y poder económico”, acusó Pulgar, y sostuvo también que “él forzó a un seminarista y le dio un tremendo beso en la boca”.
“El obispo Duarte estaba obsesionado con el tema de la masturbación y con que lo buscaran como un refugio en el caso de que te llegaran a gustar los hombres”, dijo el ex seminarista, y agregó que “tenía la obsesión de llevar seminaristas a su departamento”, dentro de los cuales no habría solo mayores de edad.
Pulgar dijo que ha recibido “cartas de amenazas de muerte” por correo certificado, y también sostuvo que alteraron su automóvil.
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