“A veces hay que prestar atención a las decisiones del pasado”: Fernando Paulsen y la asociación entre locura y gobierno
Por Fernando Paulsen
11.11.2024 / 22:21
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El periodista y panelista de Tolerancia Cero, analizó la relación existente entre la locura y la acción de gobernar, propuesta en 1984 por la escritora estadounidense, Bárbara Tuchman, y de qué forma ambos conceptos pueden impactar en el escenario actual del país.
La escritora estadounidense, Bárbara Tuchman, publicó en 1984 un libro que revolucionó la política, al asociar la palabra locura a la gestión de gobierno.
El libro, cuyo título es “La marcha de la Locura”, da cuenta de sucesos repetidos en la historia que tienen la siguiente lógica: el gobierno debe tomar una decisión y la decisión que se toma resulta totalmente contraria a los propios intereses de ese gobierno.
Tuchman pone varios ejemplos históricos, desde la guerra de Troya hasta la guerra de Estados Unidos contra Vietnam. Relata cómo desafiando todas las voces que advirtieron que ese caballo de palo a las puertas de Troya era un truco griego y que había que dejarlo afuera o quemarlo, y no, la sensación de los gobernantes de que el enemigo estaba vencido y mandaba un símbolo de rendición pudo más, y lo dejaron entrar, con el resultado escrito magistralmente por Homero en La Iliada.
Lo mismo con la entrada de EE. UU. a la guerra contra Vietnam, dejando salir a Francia del conflicto -a pesar de las voces que pedían esperar y armar una coalición de varios países-, voces desoídas por el ego patrio, para terminar perdiendo la guerra, tres presidentes más tarde.
O las advertencias de decenas de cardenales y sacerdotes de que la Iglesia renacentista dejara de utilizar malas prácticas, como vender la absolución de los pecados en la confesión o que los papas tuvieran hijos con sus amantes. Nada se escuchó hasta que vino la Reforma Protestante de Lutero y Calvino, y la Iglesia católica se quebró para siempre. ¿Por qué Carlos XII, luego Napoleón y más tarde Hitler, buscaron invadir Rusia, a pesar de que sus antecesores terminaron, todos, en un desastre?
El libro advierte que para que la locura se produzca tienen que haber estado presentes algunas cosas, como que se haya advertido lo que podría pasar, que haya habido, en la época, mejores alternativas para resolver los problemas y que todos esos consejos se hayan desoído.
Vivimos hoy un momento muy especial. Donde las democracias se debilitan, sus instituciones dejan de ser garantías de orden y justicia, y aparecen líderes vociferantes, que amenazan con traer el orden gracias al poder de las balas, y ganan acceso al gobierno por vía democrática.
Una nueva marcha de la locura parece rondar el planeta. Sé que suena como agorero de desastres, pero esto no es nuevo, como lo retrata el libro de Bárbara Tuchman, solo que para ver el problema, a veces hay que prestar atención a las decisiones del pasado. Y ver lo parecidas que son a las actuales.