El conductor de CNN Chile Radio habló sobre las publicaciones que realiza el mandatario en sus redes sociales, tomando como ejemplo los que publicó tras los datos sobre el crecimiento económico.
Esta semana el Banco Central entregó los datos ajustados de crecimiento económico de 2024. El PIB creció un 2,6% el año pasado en una cifra marginalmente superior al dato previo, aunque suficiente para que el gobierno lo destacara como un logro importante de la gestión económica, porque las proyecciones del Ministerio de Hacienda finalmente estuvieron más precisas que las que planteaban distintos actores de mercado.
Para un gobierno que en sus inicios, en palabras del propio presidente Gabriel Boric, no dimensionó la importancia que tenía el crecimiento económico, alcanzar un avance de 2,6% en el penúltimo año de gobierno puede ser efectivamente un logro importante, pero el dato está lejos de dar pie a grandes celebraciones.
Primero, porque esta cifra tiene varios matices, la inversión por segundo año consecutivo tuvo una caída, la demanda interna creció menos de lo que creció el gasto público y finalmente porque el año cerró con un déficit fiscal mayor al presupuestado que llegó al 3,2% en una suerte de esteroides para la actividad económica y además porque el gobierno se encamina a un crecimiento promedio que estará muy por debajo del que alcanzaron sus antecesores y sin crisis global de por medio.
Por eso llama la atención el tweet del presidente Gabriel Boric de este miércoles, en un tono sarcástico se pregunta qué será de Jorge Quirós, aludiendo al economista que en agosto de 2024 aseguraba que se necesitaba un milagro económico para alcanzar el crecimiento que proyectaba el gobierno.
Estaba equivocado Quiroz, es cierto, pero el dardo del presidente debela cierto conformismo y reflotó también una vez más las tensiones con el sector privado.
En distintos espacios ha hecho ver su molestia con lo que él califica como pesimismo ideológico; en foros o a través de los medios ha criticado economistas o representantes empresariales a quienes han acusado desde el gobierno de ser agoreros del pesimismo o a los medios afines a ellos, trenzándose en discusiones que en realidad tensionan el debate. Si hasta el siempre ponderado ministro Marcel ha tenido sus cruces directos con Klaus Schmidt-Hebbel por estas proyecciones erradas.
Pero todo eso omite que fue este gobierno el que renegó del crecimiento económico como un asunto urgente, por el contrario, se priorizó ser la tumba del neoliberalismo y luego el mismo mandatario confesaba que una parte de él quería derrocar el capitalismo.
El cambio de rumbo posterior fue valioso, pero no logró revertir del todo la incertidumbre inicial. Por eso los intentos por generar vínculos con el sector privado y empresarial de poco ayudan los gustitos personales que se da el presidente Boric en las redes sociales, sobre todo cuando es él quien tiene la mayor responsabilidad de liderar las condiciones para que eso ocurra y se proyecte de mejor manera el camino de crecimiento económico de largo plazo que necesita Chile.
La militante del FA respondió al diputado Sánchez, quien planteó que, dado que Tohá es considerada como "continuadora del gobierno de Boric", la opción para los sectores más a la izquierda es la actual ministra Jara.
