Mónica Rincón por chiste de Piñera: “Con o sin minifalda, las mujeres merecemos que se nos ponga atención”
Por CNN Chile
24.10.2018 / 21:11
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"¿Podemos creer al Presidente que no quiso ser machista? Yo creo que sí. Pero aún sin quererlo lo fue. Y resulta más complejo porque no es primera vez", complementó la periodista.
“Vamos a decir las cosas por su nombre“.
Estoy parafraseando a la ministra Pla cuando, requerida por la prensa, evitó referirse a la mala broma del presidente. Él sostuvo que aplicaría el principio de la minifalda, que tiene que ser “lo suficientemente larga como para tapar lo necesario y suficientemente corta para llamar la atención”.
¿Buena la broma? No ¿Es machista? Sí, evidentemente; porque alude a que las mujeres tienen que usar su cuerpo para llamar la atención.
¿Podemos creer al presidente que no quiso ser machista? Yo creo que sí. Pero aún sin quererlo, lo fue. Y resulta más complejo porque no es primera vez. Hace tiempo afirmó fue que “cuando una dama dice que sí, no es una dama”, en la campaña invitó a jugar a “que ellas se hicieran las muertas en el suelo y ellos se tiraran encima para hacerse los vivos” y el 1 de junio le comentó a la Presidenta de la Cámara “tan linda que se ve y tan dura que es”.
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Si el mandatario y su entorno no entienden que todas esas frases son machistas, la cosa es peor. Mejor enmendar la plana y asumir que no ha hecho el cambio de chip respecto de una cultura en la que creció y que, como hacen muchas personas, sigue ayudando a reproducir con sus dichos.
En el gobierno pasado, la ministra Schmidt criticó este humor del presidente. Ahora la reacción de Isabel Plá diciendo que este gobierno se preocupa de los derechos de las mujeres ha sido mala. No porque no sea cierto, sino porque una cosa no quita la otra.
Debieran saberlo en La Moneda: la cultura la creamos todos, con el lenguaje, con las bromas, con las actitudes acertadas o incorrectas. Entonces es una broma, pero la dice el presidente. Es un chiste, pero es algo serio a la vez.
Porque es con esa cultura arraigadamente machista, con la que debemos terminar. Porque, con o sin minifalda, las mujeres merecemos que se nos ponga atención.