En un nuevo capítulo de Última Mirada, el analista internacional Raúl Sohr reflexionó sobre la estrategia de los líderes europeos para aislar cada vez más al presidente de Rusia, Vladimir Putin. “Es un experimento político en oposición a la invasión a Ucrania y 44 países europeos se reunieron en Praga, prácticamente los únicos ausentes fueron Rusia y Bielorrusia. La reunión tenía el objetivo de ser un foro para analizar cómo podían hacer frente a Rusia, pero también abordar temas de migración y situación energética, que en muchos países europeos están generando varias dificultades”.