En conversación con CNN Chile, el subsecretario de Salud Pública explicó el nuevo plan "Antígenos en 3 pasos" y adelantó eventuales flexibilizaciones en las restricciones por la pandemia. Asimismo, sostuvo que una de las ideas del Minsal es avanzar a una vacunación anual contra el COVID-19.
El Ministerio de Salud lanzó la estrategia de “Antígenos en 3 pasos“, un plan que busca aumentar la capacidad de diagnóstico del COVID-19 a un bajo costo.
Al respecto, el subsecretario de Salud Pública, Cristóbal Cuadrado, explicó en CNN Chile que “la estrategia se enmarca en todo el plan ‘Yo me testeo’, en el cual acercamos a la comunidad las posibilidades para acercarse de manera oportuna”.
“Las personas pueden comprar en más de 500 farmacias del país un test de antígeno para testearse en su casa. Se puede comprar a menos de $3 mil”, sostuvo.
Asimismo, dijo que “queremos que las personas tengan más cerca de su domicilio estos test, ojalá los tengan en sus casas, para que si alguien los llama y les dice que dio positivo a COVID-19 pueda testearse sin salir de su hogar para seguir enfrentando de manera responsable esta enfermedad que llegó para quedarse“.
Respecto a eventual flexibilización de medidas sanitarias, el subsecretario aseguró que “hoy tenemos una reunión del comité interministerial de respuesta pandémica”.
“Han trabajado revisando la experiencia internacional y analizando las medidas vigentes”, afirmó. En ese sentido, añadió que “durante los últimos meses del año vamos a tener modificaciones de las medidas sanitarias”.
En ese punto, subrayó que el COVID-19 “es un virus que va a seguir viviendo con nosotros y sigue siendo de importancia, implicando que personas terminen en la UCI y fallezcan“. Por lo mismo, “tenemos que tener estrategias de largo plazo que nos permita reducir su impacto”.
El subsecretario cree que es fundamental transitar a un plan anual de vacunación, tal como el de la influenza. “Nadie dice que se está poniendo su quinta o sexta dosis de influenza. Todos los años se ofrece la vacunación”, indicó.
De esta forma, la inoculación tendría dos componentes:
Las personas rezagadas deben tener sus cuatro dosis de esquema inicial.
Grupos de riesgo requerirán refuerzos de carácter anual.