Conduce: Fernando Paulsen.
La tarde de este miércoles se vivió una alarmante situación en Bolivia, luego de que el excomandante del Ejército, Juan José Zúñiga, anunciara un golpe de Estado contra el gobierno de Luis Arce.
Pocos minutos después de la amenaza pública realizada por Zúñiga, la situación escaló considerablemente en el centro de la ciudad.
Cientos de militares se desplegaron en la zona y, posteriormente, se vio a una tanqueta del ejército atacando la puerta principal de la sede del Gobierno de Bolivia, situada en La Paz.
Tras cerca de 4 horas de tensión e incertidumbre, el intento de golpe fue frustrado. El presidente Arce nombró a una nueva jefatura de las Fuerzas Armadas, y Zúñiga fue arrestado.
Cuatro puntos clave de la tensa tarde en Bolivia
El destacado analista internacional Raúl Sohr proporcionó un análisis profundo de los eventos recientes en Bolivia y las complejidades subyacentes que los rodean, ofreciendo una comprensión más clara de la situación para la comunidad internacional.
Teoría del Autogolpe: Una teoría sugerida por Zúñiga plantea que el presidente Arce podría haber solicitado una movilización militar para fortalecer su posición política. Según Zúñiga, Arce habría mencionado su difícil situación y la necesidad de un amago de golpe para consolidar su poder. Esta versión no está corroborada y es cuestionable, pero añade una capa de intriga al incidente.
- “De hecho, el general Zúñiga dijo que él no quería cambiar al gobierno, quería cambiar parte del gabinete y dio a entender. Que en realidad esto era un autogolpe, el presidente le habría dicho que si él se movilizaba algunas tropas y hacía un amago de golpe, eso podría fortalecer su posición”.
Implicaciones de Evo Morales: Sohr mencionó la ambición del ex presidente Evo Morales de postularse nuevamente en 2025. Zúñiga afirmó que uno de sus objetivos era impedir que Morales volviera a la presidencia, lo que refleja la pugna interna dentro del Movimiento al Socialismo (MAS), el partido gobernante. Esta rivalidad entre Morales y Arce es un factor significativo en la actual crisis política.
- “Otro protagonista muy importante de esta coyuntura es el expresidente Evo Morales tiene la ambición de ser candidato presidencial el 2025. La única reivindicación clara que se le escuchó al general Zúñiga fue no vamos a permitir que Evo Morales sea otra vez presidente de Bolivia”.
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Contexto Económico y Político de Bolivia: Sohr subrayó la compleja situación económica y política del país, marcada por una escasez de dólares, combustible e inflación, además de los efectos de la pandemia y problemas ambientales. Estos desafíos han contribuido a un clima de descontento y manifestaciones callejeras, aunque no necesariamente pidiendo la caída del gobierno.
- “Bolivia está atravesando por una situación muy compleja, compleja en lo económico y compleja en lo político, gran escasez de dólares, hay escasez de combustible, hay una inflación importante, había una situación de inestabilidad militar, la crisis que tiene una serie de problemas ambientales importantes en Bolivia”.
Rechazo Unánime al Golpe: Sohr destacó la reacción unánime de condena al conato golpista por parte de toda la región latinoamericana, desde la extrema derecha hasta la extrema izquierda. Este rechazo cerrado al golpe envía una señal clara de que no hay espacio para pronunciamientos militares en la actualidad en América Latina, lo que es un buen síntoma para la estabilidad democrática en la región.
- “Fue la reacción unánime, pero unánime, desde la extrema derecha latinoamericana a la extrema izquierda… el rechazo cerrado y también en todo el espectro político boliviano al conato golpista, pero absolutamente unánime, eso es un buen síntoma en el sentido que envía una señal a cualquier golpista potencial de que en América Latina hoy día no hay ningún espacio, no hay ninguna simpatía por ningún tipo de pronunciamiento militar”.