La tensión llegó a su máximo punto tras el ataque ruso a Ucrania. En el conflicto entran en juego el control del territorio en Ucrania, el gasoducto Nord Stream 2, la movilización de militares rusos en la frontera y la presión geopolítica de la OTAN frente a la presencia de Rusia en la región.
(CNN) — El conflicto entre Ucrania y Rusia está en un momento crítico: el presidente de Rusia, Vladimir Putin, anunció una operación militar especial para proteger Donbás, la región del este de Ucrania controlada por los separatistas prorrusos.
Estos cuatro mapas ilustran los factores sobre el terreno en las tensiones Ucrania-Rusia.
Anteriormente, el Kremlin negó estar planeando un ataque y argumentó que el apoyo de la OTAN a Ucrania es una amenaza creciente en el flanco occidental de Rusia.
En la situación entran en juego el control del territorio en Ucrania, el gasoducto Nord Stream 2, la movilización de militares rusos en la frontera y la presión geopolítica de la OTAN frente a la presencia de Rusia en la región.
Lee también: ¿Qué quiere Putin en Ucrania? 4 claves del conflicto que tiene en alerta al mundo
El control del territorio en Ucrania y Rusia
Muchas de las bases militares rusas se encuentran al oeste de Ucrania, desde donde es más probable —así lo sugiere la historia— que provenga cualquier amenaza contra Rusia. El Ministerio de Defensa de Rusia ha dicho que está realizando ejercicios militares de invierno “regulares” en su región meridional, partes de la cual son fronterizas con Ucrania.
Mientras tanto, las regiones orientales ucranianas de Donetsk y Lugansk, fronterizas con Rusia, una zona conocida como Donbás, están bajo el control de los separatistas respaldados por Rusia desde 2014. Las fuerzas rusas también están presentes en la zona, a la que Ucrania se refiere como “territorios temporalmente ocupados”, aunque Rusia lo niega.
Las líneas del frente del conflicto apenas se movieron en cinco años, pero son frecuentes los enfrentamientos a pequeña escala y los ataques de francotiradores. Rusia se enfadó cuando las fuerzas ucranianas desplegaron por primera vez en octubre un dron de combate de fabricación turca para atacar una posición de los separatistas prorrusos.
Lee también: Zelensky asegura que fuerzas rusas están tratando de tomar el control de la planta nuclear de Chernobyl
Rusia también tiene fuerzas que se cuentan por decenas de miles en su enorme base naval de Crimea, el territorio ucraniano que se anexionó en 2014. La península de Crimea, situada al sur del resto de Ucrania, está ahora conectada por un puente de carretera con la Rusia continental.
La presencia de solados rusos
Hasta 100.000 soldados rusos han permanecido reunidos en la frontera con Ucrania, a pesar de las advertencias del presidente de EE.UU. Joe Biden y de los líderes europeos sobre las graves consecuencias si Putin sigue adelante con una invasión. Y los resultados de la inteligencia estadounidense han estimado que Rusia podría comenzar una ofensiva militar en Ucrania “tan pronto como a principios de 2022”.
La última evaluación de inteligencia del Ministerio de Defensa de Ucrania dice que Rusia ahora ha desplegado más de 127.000 soldados cerca de Ucrania, incluidos unos 21.000 personal aéreo y marítimo, transfirió más misiles tácticos operativos Iskander a la frontera y aumentó su actividad de inteligencia contra el país.
Lee también: Portavoz ucraniano informa casi 400 bombardeos por parte de las fuerzas rusas
El factor del gasoducto
Otra cuestión importante gira en torno al suministro de energía. Ucrania considera que el controvertido gasoducto Nord Stream 2, que conecta el suministro de gas ruso directamente con Alemania, es una amenaza para su propia seguridad.
Nord Stream 2 es uno de los dos gasoductos que Rusia tendió bajo el agua en el mar Báltico, además de su tradicional red de gasoductos terrestres que atraviesa el este de Europa, incluida Ucrania.
Kyiv considera que los gasoductos que atraviesan Ucrania son un elemento de protección contra una invasión de Rusia, ya que cualquier acción militar podría interrumpir el flujo vital de gas hacia Europa.
Analistas y legisladores estadounidenses expresaron su preocupación por el hecho de que Nord Stream 2 aumente la dependencia europea del gas ruso y permita a Moscú atacar selectivamente a países como Ucrania con cortes de energía sin que se produzca una interrupción más amplia del suministro europeo. Eludir a los países de Europa del Este significa también que esas naciones se verían privadas de las lucrativas tarifas de tránsito que Rusia pagaría de otro modo.
Lee también: “Agrega un riesgo económico significativo para el mundo”: Directora del FMI dice estar preocupada por situación en Ucrania
En mayo de 2021, el gobierno de Biden renunció a las sanciones impuestas a la empresa que está detrás del Nord Stream 2, dándole así luz verde. Funcionarios estadounidenses afirman que la medida se adoptó en interés de la seguridad nacional de Estados Unidos, en un intento de reconstruir las deterioradas relaciones con Alemania.
En noviembre, Estados Unidos impuso nuevas sanciones a una entidad vinculada a Rusia y a un buque relacionado con Nord Stream 2. Algunos senadores estadounidenses pidieron que se impongan más sanciones para evitar que Rusia utilice el gasoducto como arma; también Ucrania pidieron medidas más duras.
La presión de la OTAN
La OTAN, Organización del Tratado del Atlántico Norte, para darle su nombre completo, es una alianza de defensa europea y norteamericana no agresiva creada para promover la paz y la estabilidad y salvaguardar la seguridad de sus miembros.
La OTAN ya tenía tropas en el este de Europa antes del reciente aumento de las tensiones con Rusia, pero aumentó su presencia allí en las últimas semanas.
Según la OTAN, actualmente hay cuatro grupos de combate multinacionales del tamaño de un batallón en Estonia, Letonia, Lituania y Polonia, de forma rotativa.
Estos grupos de combate están dirigidos por el Reino Unido, Canadá, Alemania y Estados Unidos. La OTAN dijo el 7 de enero que son “fuerzas robustas y listas para el combate”.
Lee también: Líderes del G7 condenan a Putin por atacar a Ucrania: “Se ha puesto en el lado equivocado de la historia”
El secretario General de la OTAN, Jens Stoltenberg, dijo que la alianza está preparada para reforzar rápidamente esa presencia enviando fuerzas y capacidades adicionales a la zona.
El 28 de enero Biden dijo que trasladará tropas estadounidenses a los aliados de la OTAN en Europa del Este en el “corto plazo”. Antes de ese anuncio, el gobierno de Biden había puesto hasta 8.500 soldados estadounidenses en alerta máxima para un posible despliegue en el este de Europa.
De forma más inmediata, varios países de la OTAN han comenzado a enviar armas y municiones a Ucrania.
Estados Unidos ya envió dos cargamentos de armas a Ucrania, incluyendo 300 misiles antitanque Javelin, 800 bombas antibúnker y cientos de miles de cartuchos. El Reino Unido entregó a Ucrania nuevas armas antitanque ligeras, y el gobierno de la República Checa acordó el miércoles donar más de 4.000 proyectiles de artillería de calibre 152 milímetros.