Cuando Alan W. Wilmer murió en diciembre de 2017, las autoridades de Virginia necesitaban identificarlo y tomaron una muestra de ADN. Ahora, seis años después, establecieron que su material genético coincidía con el hallado en las víctimas de un doble tiroteo en 1987 y en una mujer estrangulada en 1989.
(CNN) – Cuando Alan W. Wilmer Sr., de 63 años, murió en diciembre de 2017, las autoridades de Virginia necesitaban identificarlo y tomaron una muestra de ADN: seis años después, ese material genético lo vinculó con los asesinatos de tres personas en la década de 1980, dijeron las autoridades este martes.
El material genético de Wilmer coincidía con el hallado en las víctimas de un doble tiroteo en 1987 y en una mujer que había sido estrangulada en 1989 en la región de Hampton Roads, dijo la portavoz de la Policía Estatal de Virginia, Corinne Geller, en una conferencia de prensa.
“A través de las pruebas forenses analizadas y certificadas por el Departamento de Ciencias Forenses de Virginia, Alan Wade Wilmer Sr. fue declarado responsable (de los asesinatos)“, sostuvo Geller a periodistas.
El caso
Los tiroteos mortales de David L. Knobling, de 20 años, y Robin M. Edwards, de 14, en el condado de Isle of Wight hace casi 37 años, se habían agrupado en otros dobles homicidios conocidos como los asesinatos de Colonial Parkway. Pero Geller afirmó que en este momento no hay pruebas que vinculen esos casos sin resolver con los asesinatos relacionados con Wilmer.
Knobling y Edwards fueron vistos por última vez el 19 de septiembre de 1987, y sus cuerpos fueron encontrados cuatro días después en la orilla sur del río James, en el condado de Isle of Wight, según las autoridades.
La muerte por estrangulamiento de Teresa Lynn Spaw Howell, de 29 años, nunca se consideró uno de los casos de Colonial Parkway. Fue vista por última vez a la salida de un club nocturno de Hampton el 1 de julio de 1989, y su ropa fue encontrada menos de 12 horas después por unos obreros de la construcción a unos ocho kilómetros de distancia, según las autoridades. Su cuerpo fue descubierto en un bosque cercano.
Howell fue encontrada a menos de 25 km de donde se hallaron los cuerpos de Knobling y Edwards, y al igual que Edwards, había sido agredida sexualmente, según las autoridades.
La policía sigue buscando información sobre Wilmer, un pescador comercial que a veces vivía en su barco, pero que también fue visto en una camioneta con una matrícula distintiva. Geller manifestó que los dos casos de los que se habló este martes están “resueltos pero no cerrados” y que están investigando si Wilmer podría haber cometido otros delitos.
Las autoridades no dijeron este martes por qué decidieron buscar a Wilmer como sospechoso. Wilmer no tenía condenas por delitos graves, por lo que no se tomó su ADN en vida, dijo Geller.
“Hemos vivido con el temor de preocuparnos de que una persona que mató deliberadamente a Robin y David pudiera atacar y cobrarse otra víctima”, escribieron las familias de Knobling y Edwards en un comunicado difundido por la policía estatal. “Ahora tenemos una sensación de alivio y justicia al saber que ya no podrá victimizar a otro“.
Pero lamentaron que les quedaran interrogantes sobre los asesinatos debido a la muerte de Wilmer.
La familia de Howell también emitió un comunicado y pidió privacidad. “Aunque estamos agradecidos por el cierre que se ha proporcionado, nada traerá de vuelta a Teri”, afirmó la familia. “El vacío dejado por su ausencia a lo largo de los años es inexpresable“.
En la década de 1980, Wilmer era un pescador que a menudo atracaba su barco de pesca comercial en los condados de Gloucester y Middlesex, dijo la Policía estatal en un comunicado. También dirigía un servicio de árboles y cazaba con frecuencia.
Medía 1,65 metros de alto, era musculoso y pesaba aproximadamente 74 kg, de acuerdo con la policía estatal. Las autoridades han pedido a cualquier persona que pueda haber tenido contacto con Wilmer que se presente.
(Sara Smart, de CNN, contribuyó a este reportaje).