El exmandatario fue denunciado por su otrora pareja por violencia de género y posteriormente la justicia argentina decretó medidas de restricción y protección en favor de Yáñez. Sin embargo, Fernández ha negado los hechos.
Fue el pasado martes 6 de agosto cuando salió a la luz pública la denuncia por violencia de género que interpuso Fabiola Yáñez, en contra de su expareja, el expresidente de Argentina, Alberto Fernández.
Tras la denuncia de la periodista contra el exmandatario, el juez federal Julián Ercolini decretó de forma urgente medidas de “restricción y protección” en favor de Yáñez.
A ello también se suma un “video romántico” difundido por LN+, donde se observa un intercambio íntimo de Fernández con la panelista televisiva Tamara Pettinato, aparentemente en su despacho en la Casa Rosada.
Posteriormente, la exprimera dama otorgó una entrevista a Infobae, en Madrid, donde abordó la situación. “He cuidado a este hombre… Lo he cuidado de tantas cosas que él ha hecho, que esos videos que aparecieron el otro día son poca cosa al lado de las cosas que él ha hecho”, afirmó.
Esto, en relación a unas fotografías que aparecieron de Yáñez, donde se le mostraba con el ojo y una de sus axilas moradas.
¿Qué dijo Fernández?
Tras conocerse los antecedentes, el otrora mandatario rompió el silencio y relató al medio argentino El Cohete a la Luna su versión de los hechos. De todos modos, el medio no publica la entrevista textual, y alude a que están a la espera de otra conversación de Fernández con El País de España.
De todos modos, entregan algunos extractos de los alegatos de Fernández: “El expresidente tiene una explicación para las fotografías, pero trastabilla ante los chats en los que Yáñez lo acusa de golpearla durante tres días seguidos”.
Y añade: “Su asombrosa explicación es que ella le pegaba a él durante las discusiones que admite frecuentes por el estado de salud de su esposa. Al defenderse él la tomaba de los brazos, lo cual explicaría los moretones. Una médica clínica que observó las fotos dice que el hematoma en la axila no corresponde a la marca que dejan los dedos cuando aprietan. ‘Parece producto de un golpe, no de un zamarreo’. En cualquier caso, esto revela la importancia de la realización de un peritaje que disipe toda duda”.
Asimismo, en torno a los moretones de Yáñez, “el expresidente alega que el hematoma no se debe a un golpe, sino a un tratamiento estético contra las arrugas”.
Además, de acuerdo al citado medio, Fernández reiteró “en forma obsesiva varias preguntas: Si soy un golpeador, ¿por qué se sometió a un tratamiento de fertilidad para que tuviéramos un hijo?, ¿por qué no hay un solo testimonio de alguien a quien ella le hubiera contado del alegado maltrato? ¿viví 17 años con Marcela Luchetti (la madre de su hijo Tani) y 10 con Vilma Ibarra, y no hay un solo episodio de que yo las haya agredido”.