Los argumentos de Israel para retomar su guerra contra Hamás, cómo ha afectado a los palestinos en Gaza y cuánta incidencia ha tenido Estados Unidos en estos nuevos ataques lo revisa Mick Krever, de CNN.
Análisis de Mick Krever, CNN
(CNN) – El alto el fuego entre Israel y Hamás, vigente desde hace apenas dos meses, ha sido inestable durante algún tiempo. Pero quedó totalmente destrozado por el bombardeo israelí sobre Gaza que comenzó en la madrugada del martes.
Los ataques mataron a cientos de palestinos. El martes fue el día más mortífero en Gaza desde las primeras semanas del conflicto que comenzó a finales de 2023.
El ejército declaró el miércoles que había lanzado “actividades terrestres selectivas” en Gaza y recuperado parcialmente el importante Corredor Netzarim, que divide la Franja. Los ataques en toda la Franja de Gaza continuaron hasta el miércoles, incluyendo Al-Mawasi, que desde hace tiempo ha sido designada zona segura por el ejército israelí, a pesar de los continuos ataques allí.
Israel ha vuelto a emitir órdenes de evacuación obligatoria para franjas de Gaza, lanzando panfletos que ordenan a los civiles que se retiren. Una vez más, los palestinos están siendo desarraigados.
“De ahora en adelante, las negociaciones solo se llevarán a cabo bajo fuego”, declaró el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, en un discurso televisado el martes por la noche. “Quiero asegurarles: esto es solo el comienzo”.
Esto es lo que hay que saber sobre la reanudación del conflicto.
El gobierno israelí ha dado diferentes razones.
Durante la noche, el ministro de Defensa de Israel, Israel Katz, dijo que los ataques se debieron “a la negativa de Hamás a liberar a los rehenes y a las amenazas de dañar a los soldados de las FDI y a las comunidades israelíes”.
Si esa parece ser la misma razón que Israel ha dado para atacar Gaza desde el 7 de octubre de 2023, es porque lo es. Los objetivos de la guerra de Israel en Gaza son devolver a los rehenes restantes tomados por Hamás y destruir la capacidad de gobierno y militar de este grupo.
Más tarde el martes, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Israel declaró que los ataques se debieron a que «Hamás rechazó dos propuestas concretas de mediación presentadas por el enviado del presidente estadounidense, Steve Witkoff». Hablaremos más sobre esto en breve.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, pronuncia un discurso el martes. Oficina de Correos General.
Un funcionario israelí dijo que los ataques aéreos de Israel en Gaza son la primera fase de una serie de acciones militares en aumento destinadas a presionar a Hamas para que libere más rehenes, lo que marca un regreso a la opinión de Netanyahu de que la presión militar es la forma más efectiva de asegurar la liberación de rehenes.
Desde el 7 de octubre de 2023, el ejército israelí ha devuelto a Israel a ocho rehenes vivos, de los 251 tomados por Hamás y sus aliados.
La política interna israelí es un factor importante.
A la extrema derecha israelí nunca le gustó el alto el fuego en Gaza, pues lo considera una capitulación ante Hamás. Quieren que todos los palestinos abandonen Gaza y que Israel restablezca los asentamientos que evacuó en 2005.
Netanyahu necesita esa facción para gobernar. Un ministro de extrema derecha, Itamar Ben Gvir, renunció al gobierno en protesta por el alto el fuego. Otro, Bezalel Smotrich, dijo que se marcharía si Israel no volvía a la guerra. Eso habría desgarrado la coalición de gobierno de Netanyahu.
Pero el martes, el partido de Ben Gvir, Poder Judío, anunció su reincorporación al gobierno. Esto representa una gran victoria política para Netanyahu y la estabilidad de su coalición.
El regreso del conflicto en Gaza también distraerá la atención del deseo de Netanyahu de destituir al director de la agencia de seguridad internacional israelí, el Shin Bet. Esta decisión, anunciada el domingo, ha provocado convocaciones a protestas masivas.
Itamar Ben-Gvir, quien renunció al gobierno tras el alto el fuego en enero, anunció el martes que regresará. Oren Ben Hakoon/Reuters
Tanto Smotrich como Ben Givr creen que Israel ha sido demasiado tímido al conducir la guerra.
“Esta es una operación por fases que hemos planeado y construido en las últimas semanas desde que el nuevo Jefe del Estado Mayor de las FDI asumió el cargo”, declaró Smotrich el martes. “Y con la ayuda de Dios, será completamente diferente a lo que se ha hecho hasta ahora”.
Israel y Hamás iniciaron un alto el fuego el 19 de enero, cuya primera fase duró 42 días. Hamás ha dejado claro su deseo de iniciar negociaciones para una posible segunda fase, tal como se estipula en el acuerdo de tregua.
Según los términos de la segunda fase, Israel tendría que retirarse completamente de Gaza y comprometerse a un fin permanente de la guerra. A cambio, Hamás liberaría a todos los rehenes vivos.
Israel ha dejado claro que exige nuevas condiciones. Quiere que Hamás siga liberando rehenes a cambio de prisioneros palestinos, pero sin ningún compromiso de poner fin a la guerra ni de retirar sus fuerzas armadas.
Los militantes de Hamás entregan a los rehenes Eliya Cohen, Omer Shem Tov y Omer Wenkert a la Cruz Roja en el centro de Gaza el 22 de febrero. Eyad Baba/AFP/Getty Images.
Las dos partes debían discutir una segunda fase a partir del 3 de febrero, pero el gobierno israelí ignoró ese plazo.
Rompiendo con décadas de tradición, Estados Unidos comenzó a dialogar directamente con Hamás, a la que considera una organización terrorista. Israel envió equipos negociadores a Qatar y Egipto, incluso el domingo, “en un esfuerzo por avanzar en las negociaciones”.
Israel afirma que el enviado estadounidense para Oriente Medio, Steve Witkoff, propuso una extensión del alto el fuego de un mes hasta Ramadán y luego Pésaj a finales de abril, pero sin ninguno de los compromisos asumidos en enero. Hamás rechazó de inmediato ese plan, afirmando que Netanyahu y su gobierno estaban llevando a cabo un flagrante golpe de Estado contra el acuerdo de alto el fuego ya pactado.
Ha quedado claro que ambas partes están a océanos de distancia.
Hamás ofreció la semana pasada liberar al soldado estadounidense-israelí Edan Alexander, junto con los cadáveres de otros cuatro ciudadanos con doble nacionalidad, presumiblemente cuatro estadounidenses-israelíes fallecidos. A cambio, afirmó que Israel debe cumplir con el acuerdo de alto el fuego de tres fases firmado por todas las partes el 17 de enero de 2025.
Israel calificó esa oferta de “guerra psicológica”.
El ejército israelí ha dado muy pocos detalles sobre su operación. Su primer anuncio indicó que estaban llevando a cabo “amplios ataques contra objetivos terroristas pertenecientes a la organización terrorista Hamás en la Franja de Gaza”.
Más tarde ese mismo martes, el ejército ordenó a los palestinos en franjas de Gaza, a kilómetros de la frontera con Israel, que abandonaran sus hogares.
Esto ha dado lugar a especulaciones sobre que Israel podría estar preparando una nueva invasión terrestre e incluso podría intentar ocupar centros urbanos en Gaza, algo que no ha hecho hasta ahora.
Hombres llevan el cuerpo de un palestino muerto en un ataque aéreo israelí en la ciudad de Gaza el martes. Abdel Kareem Hana/AP.
Después de que el alto el fuego entró en vigor el 19 de enero, Israel retiró sus tropas a las fronteras de Gaza: con Egipto al sur y con Israel al norte y al este.
Es poco probable que detenga su creciente ofensiva militar sin un acuerdo para liberar a más rehenes, decidido a obligar a Hamás a negociar bajo fuego.
Israel planea incrementar gradualmente las operaciones militares en Gaza, dijo el funcionario israelí, pero no está claro cuán pronto Israel podría enviar tropas terrestres al combate en Gaza nuevamente.
Por otra parte, Hamás y sus aliados –que han matado a cientos de soldados israelíes en Gaza desde el 7 de octubre de 2023– parecen estar comprometidos con los términos del alto el fuego existente, por ahora.
Israel ha afirmado en varias ocasiones desde el 19 de enero que se habían lanzado cohetes desde Gaza, pero bien dentro del territorio. Sin embargo, no ha aportado pruebas de ello, y Hamás no ha lanzado cohetes contra Israel durante los dos meses de tregua.
Es devastador.
El martes ya es el día más mortífero en Gaza en más de un año: desde el 7 de noviembre de 2023, cuando 548 palestinos fueron asesinados.
Han pasado más de dos semanas desde que Israel bloqueó la entrada de toda ayuda humanitaria a Gaza, en respuesta, según afirmó, a la negativa de Hamás a aceptar las nuevas condiciones israelíes para la tregua. La guerra exacerbará ese sufrimiento.
Ya el martes se volvió a ver a masas de palestinos en movimiento, con órdenes militares de tomar lo poco que tenían y abandonar las zonas consideradas inseguras.
Ahmad Al Shaafi, quien se ha estado refugiando en Deir el Balah, dijo a CNN que el bombardeo comenzó alrededor de las 2 am.
“¿Acaso los israelíes no tienen ninguna promesa que cumplir? Fue una noche aterradora”, dijo. “Solo Dios es misericordioso. Aún quedan dos niños bajo los escombros: uno de 26 años y el otro de 5. No podemos recuperarlos”.
El ejército israelí ha matado a casi 49.000 palestinos en Gaza desde el ataque de Hamás del 7 de octubre, la mayoría de ellos civiles, según el Ministerio de Salud local.
“Avivar el ‘infierno en la tierra’ reanudando la guerra sólo traerá más desesperación y sufrimiento”, dijo el martes el principal funcionario de la ONU para asuntos palestinos, Philippe Lazzarini.
Es un golpe durísimo. Todavía hay 59 rehenes en Gaza, de los cuales se cree que 24 siguen con vida.
Las familias de los que aún siguen detenidos están indignadas.
“El gobierno israelí decidió renunciar a los rehenes”, declaró el Foro de Rehenes y Familias Desaparecidas en un comunicado. “Estamos conmocionados, indignados y aterrorizados por el desmantelamiento deliberado del proceso para el regreso de nuestros seres queridos del terrible cautiverio de Hamás”.
Karoline Leavitt, secretaria de prensa de la Casa Blanca, dijo el lunes que “la administración Trump y la Casa Blanca fueron consultadas por los israelíes sobre sus ataques en Gaza”.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se atribuyó el mérito del alto el fuego que comenzó justo antes de asumir el cargo, y sus asesores desempeñaron un papel importante a la hora de presionar a Netanyahu para que lo aceptara.
Pero también ha dejado claro que apoyaría que Israel reanude la guerra.
“Le envío a Israel todo lo que necesita para terminar la tarea; ningún miembro de Hamás estará a salvo si no hacen lo que les digo”, declaró a principios de mes. “¡LIBEREN A LOS REHENES AHORA, O SE PAGARÁ UN INFIERNO DESPUÉS!”.
La militante del FA respondió al diputado Sánchez, quien planteó que, dado que Tohá es considerada como "continuadora del gobierno de Boric", la opción para los sectores más a la izquierda es la actual ministra Jara.
