Países de todo el mundo enviaron mensajes de apoyo a Ucrania e incluso iluminaron sus monumentos más importantes con los colores de su bandera.
Hoy se cumple un año desde el primer ataque del ejército ruso en contra de Ucrania. El presidente del país invadido, Volodymyr Zelensky, expresó que ha sido un año “lleno de dolor y tristeza, pero también de fe y unidad”.
“A pesar de todo, nos hemos mantenido invencibles. ¡Sabemos que 2023 será el año de nuestra victoria!”, añadió el mandatario.
Zelenski publicó un mensaje en sus redes sociales, acompañándolo de un vídeo con imágenes de las víctimas de la guerra, de los heridos y desplazados, de la lucha de los soldados del Ejército ucraniano, y de las múltiples manifestaciones en distintas ciudades del mundo en apoyo a Kiev.
“El 24 de febrero, millones de nosotros hicimos una elección. No una bandera blanca, sino la azul y amarilla. No huyendo, sino enfrentando. Resistir y luchar. Fue un año de dolor, tristeza, fe y unidad. Y este año, nos mantuvimos invencibles. ¡Sabemos que 2023 será el año de nuestra victoria!“, indicó en su tuit.
Su homólogo ruso, Vladímir Putin, ha defendido su posición tras este conflicto bélico, y aseguró que Ucrania solo es “un títere” de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN), y de los países de occidente, quienes son “los verdaderos culpables de la guerra”.
Recientemente, la máxima autoridad rusa habló públicamente sobre el tema luego de dos años en silencio. En dicho discurso, indicó que la comunidad internacional está manipulando a Ucrania y lo está transformando en una plataforma de despliegue de misiles para mantener amenazado a Rusia, así que “no nos dejaremos amedrentar”, indicó la cabeza de gobierno.
Apoyo internacional
Ya cumplido el primer aniversario del inicio de la guerra entre Rusia y Ucrania, diferentes instituciones de todo el mundo han iluminado la noche de este jueves los edificios más conocidos de su territorio con los colores de la bandera ucraniana.
Por ejemplo, la Torre Eiffel cambió su iluminación nocturna. El emblemático monumento tomó el color azul para la aguja y el amarillo para la base.
El Consejo de la UE se iluminó con los colores de la bandera ucraniana.
En la puerta de Brandemburgo, Alemania, una concentración dibujó el símbolo de la paz con velas en apoyo al país eslavo.