Blinken es el primer secretario de Estado que viaja a China en cinco años y el funcionario estadounidense de mayor rango en realizar una misión de este tipo desde que el presidente Joe Biden asumió el cargo a principios de 2021.
(CNN) –El secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, inició su reunión este lunes con el presidente de China, Xi Jinping, en Beijing, según la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores chino, Hua Chunying.
En un video de la cadena estatal china CCTV, Xi declaró en una reunión con el secretario de Estado estadounidense Antony Blinken: “Las dos partes acordaron seguir adelante con el entendimiento común que el presidente Biden y yo hemos alcanzado en Bali. Las dos partes han hecho progresos y han llegado a acuerdos sobre algunas cuestiones concretas. Esto es muy bueno”.
“Las interacciones entre Estados deben basarse siempre en el respeto mutuo y la sinceridad. Espero que a través de esta visita, señor Secretario, usted haga más contribuciones a la estabilización de las relaciones entre EE.UU. y China”, dijo Xi en una reunión Blinken.
Durante la reunión, que tuvo una duración de media hora, Blinken declaró que una relación gestionada “responsablemente” entre China y Estados Unidos era “en interés de Estados Unidos, en interés de China y en interés del mundo“.
“En los últimos días, he mantenido conversaciones francas y constructivas con el consejero de Estado Qin Gang y el director Wang Yi”, dijo Blinken. “Y hemos cubierto una amplia gama de asuntos tanto bilaterales como globales“.
Las dos potencias mundiales están cada vez más enfrentadas y existe un gran interés internacional por saber si el viaje de Blinken puede garantizar un alivio de las tensiones entre las dos mayores economías del mundo.
Previamente en la mañana de este lunes, Blinken se reunió con el diplomático de más alto nivel de China en el último día de una visita de alto nivel a Beijing destinada a estabilizar las relaciones, que se deterioraron a raíz de una disputa sobre un globo de vigilancia chino.
Wang Yi es el director de la oficina de la comisión central de Asuntos Exteriores del Partido Comunista de China, lo que le convierte en el diplomático de mayor rango de China, por encima del ministro de Relaciones Exteriores, Qin Gang.
Blinken y el jefe de la diplomacia china, Wang Yi, mantuvieron una “conversación sincera y productiva”, según informó este lunes en un comunicado el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller.
“Abordaron una serie de cuestiones bilaterales y globales que afectan a las personas en Estados Unidos, la República Popular China (RPC) y en todo el mundo”, señala el comunicado.
Blinken “subrayó la importancia de gestionar responsablemente la competencia entre Estados Unidos y China a través de canales abiertos de comunicación para garantizar que la competencia no se desvíe hacia el conflicto“, dijo Miller.
Blinken también reiteró que Estados Unidos “seguirá utilizando la diplomacia para plantear áreas de preocupación y defender los intereses y valores del pueblo estadounidense”.
Ambos también “discutieron oportunidades para explorar la cooperación en desafíos transnacionales compartidos”, dijo Miller, sin especificar más.
Blinken es el primer secretario de Estado que viaja a China en cinco años y el funcionario estadounidense de mayor rango en realizar una misión de este tipo desde que el presidente Joe Biden asumió el cargo a principios de 2021.
Funcionarios de ambos gobiernos han señalado bajas expectativas para la visita, y un alto funcionario del Departamento de Estado les dijo a los periodistas a principios de esta semana que no espera “una larga lista de resultados”.
Se espera que este lunes sea una prueba clave de hasta dónde pueden llegar las dos potencias para estabilizar sus fracturadas líneas de comunicación, que se han roto en el último año, especialmente cuando se trata de intercambios militares de alto nivel, lo que suscita la preocupación en Washington de que un error o accidente pueda derivar rápidamente en un conflicto.
El primer día de la visita de Blinken, este domingo, estuvo marcado por las tensiones, y el ministro de Asuntos Exteriores chino, Qin Gang, afirmó durante su reunión con el enviado estadounidense que la relación entre China y Estados Unidos se encontraba en el “punto más bajo” desde el restablecimiento de las relaciones diplomáticas en 1979, según Beijing.
El hecho de que Blinken se reúna también con Xi será un indicador clave del interés de China en tomar medidas para reconstruir esa relación.
Reunión con el canciller
El objetivo principal de Blinken en China es restablecer los canales de comunicación, especialmente la comunicación directa entre militares entre Washington y Beijing, según un alto funcionario del Departamento de Estado.
Su comitiva aterrizó en Beijing el domingo con una agenda completa para el primer día que comenzó con una reunión con el ministro de Relaciones Exteriores de China, Qin Gang, quien asumió el cargo hace seis meses después de terminar un período como embajador de Beijing en Washington.
Blinken y Qin se dieron la mano frente a los reporteros en la Casa de Huéspedes del Estado de Diaoyutai el domingo por la tarde, su primera reunión en persona en sus puestos actuales.
Los dos funcionarios intercambiaron breves cortesías en inglés sobre el vuelo de la delegación estadounidense antes de dirigirse a una sala de reuniones bien iluminada, con grandes ventanales que dan a un estanque de lotos y una gran pintura tradicional china en tinta en la pared.
Durante la reunión, que duró más de cinco horas, Blinken invitó a Qin a visitar Washington y la invitación fue aceptada, dijo el portavoz del Departamento de Estado, Matt Miller, en una lectura de la reunión.
“El secretario invitó al canciller Qin a Washington para continuar las discusiones y acordaron programar una visita recíproca en un momento mutuamente adecuado”, dijo Miller, y agregó que Blinken enfatizó la “importancia de la diplomacia y el mantenimiento de canales de comunicación en toda la gama de problemas para reducir el riesgo de percepción errónea o error de cálculo”.
Blinken también expresó las preocupaciones de Estados Unidos en varios frentes y oportunidades para trabajar junto con China donde se alinean los intereses, dijo Miller.
Los funcionarios estadounidenses que participaron en la reunión incluyeron al subsecretario de Estado para Asuntos de Asia Oriental y el Pacífico, Daniel Kritenbrink, y al embajador estadounidense en China, Nicholas Burns.
Por parte china, Qin estuvo acompañado por otros funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores, incluido el viceministro de Relaciones Exteriores, Hua Chunying.
En general, la reunión del domingo fue “directa” y resultó en avances “en varios frentes” con ambas partes mostrando un “deseo de reducir las tensiones”, dijo a los periodistas un alto funcionario del Departamento de Estado. Pero las “profundas diferencias” entre EE.UU. y China también quedaron claras durante la reunión, agregó el funcionario.
“Nadie tenía la idea preconcebida de que íbamos a resolver todos los problemas difíciles en una o dos reuniones”, agregó el funcionario, y señaló que era importante iniciar la conversación.
Una cosa que las dos partes acordaron fue la necesidad de expandir los vuelos entre los dos países, dijeron funcionarios estadounidenses. Pero no compartieron ningún acuerdo sobre ese tema, ni sobre ningún otro tema sustantivo, con los reporteros.
Después de la reunión de la tarde, Blinken pasó a una cena de trabajo con Qin, indicó el Departamento de Estado de EE.UU. a la prensa itinerante.
Relación tensa
La relación de la administración de Biden con Beijing es una de las más complicadas y consecuentes, y ha sufrido meses de tensión, con dos incidentes relacionados con el ejército en las últimas semanas.
Biden y Xi se reunieron en persona por primera vez como presidentes al margen de la cumbre del Grupo de los Siete en Indonesia en noviembre pasado.
El viaje de Blinken, anunciado por Biden y Xi después de su reunión, estaba originalmente programado para febrero y se había visto como un compromiso de seguimiento clave. Sin embargo, se pospuso después del descubrimiento de un presunto globo espía chino que transitaba por EE.UU., lo que Blinken dijo en ese momento “creó las condiciones que socavan el propósito del viaje”.
Hablando con los periodistas el sábado, Biden reconoció las “diferencias legítimas” con China, pero sostuvo que estaba dispuesto a discutir las “áreas en las que podemos llevarnos bien”.