CNN obtuvo esta base de datos a través de una solicitud de Acceso a la información pública. La paradójica relación dispar entre el aumento de personas que ingresan a la Casa Rosada y la cada vez más grande cantidad de comida contrasta con una imagen que cada noche se repite en la Plaza de Mayo. Organizaciones solidarias reparten platos de comida para personas en situación de vulnerabilidad social.
(CNN Español) – La cantidad de visitas a la Casa Rosada (Argentina) este año cayó 17,6% si se compara el período entre el 1 de enero y el 17 de abril de 2022 y los mismos días de 2023, pero al mismo tiempo aumentó la cantidad de alimentos y bebidas en las órdenes de compra abierta a cargo de la Secretaría General de Presidencia, de acuerdo con el análisis de CNN de los documentos oficiales.
Por ejemplo, la cantidad de medialunas de grasa (croissants salados) creció 61%, se duplicó el número de gaseosas en botellas de 2,25 litros, además de fuertes incrementos en otras comidas como las bananas “premium” (117,3%).
Una fuente de Presidencia con conocimiento de estos procesos admitió sobreprecios respecto a los acordados según la política de Precios e incumplimientos de los contratos en el plazo de los pagos por parte del Estado.
CNN consultó a la oficina de la portavoz de la Presidencia, pero hasta el momento no hemos obtenido respuesta.
“Sería importante que esto llegue a la Justicia para que se investigue si se llegan a encontrar sobreprecios y si se llega a encontrar una disonancia entre cantidad de gente y la cantidad de alimentos, para que Casa Rosada responda”, opinó el director ejecutivo de Poder Ciudadano, capítulo argentino de Transparencia Internacional, Pablo Secchi.
¿Qué es lo que sucede dentro de la Casa Rosada? Conocer quiénes ingresan es una manera de investigarlo. Nombre, cargo, fecha y hora. Eso es lo que queda registrado en el sistema de Casa Militar cada vez que alguien entra a la sede del Poder Ejecutivo.
CNN obtuvo esa base de datos a través de una solicitud de Acceso a la información pública. El intervalo de fechas que la componen comienza el 12 de julio de 2019 y finaliza el 17 de abril de 2023, último dato disponible al momento del pedido de información.
“Vacía, literal, vacía. Físicamente. No viene nadie”, describió la periodista acreditada por Ámbito Financiero en Casa Rosada, Liliana Franco, sobre lo que observa actualmente.
“No se ve ese movimiento, esa actividad, ese bullicio para llevar cosas. Hay mucha tranquilidad, te diría”, indicó el periodista acreditado por Télam Raúl Berneri.
“Podemos decir con poca actividad desde hace varios meses”, señaló el periodista acreditado por La Nación Jaime Rosemberg.
Medialunas y gaseosas
En las órdenes de compra destacan las adquisiciones de medialunas y gaseosas. Estas son de consumo exclusivo para el sector de Presidencia, Jefatura de Gabinete y eventos especiales, tal como explicó la fuente de Presidencia. Las personas que no pertenecen a esos grupos deben pagar esos productos, señaló la fuente.
Un análisis de los montos adjudicados muestra sobreprecios del 49,1% en medialunas de manteca de la orden de compra del 28 de marzo de 2023 en comparación con el programa estatal Precios Justos, que incluye productos a precios acordados entre el Ministerio de Economía y empresas. También se detectó un sobreprecio del 59,5% en latas de gaseosa y del 25,1%, en promedio, en bebidas de la orden de compra del 12 de mayo de 2023 comparado con valores de supermercados minoristas.
Consultada por posibles sobreprecios, la fuente de Presidencia con conocimiento de las compras respondió: “Debe ser y es porque resulta inviable mantener el precio durante 6 meses”.
Seis meses es el tiempo de duración de las órdenes de compra abierta. Este es un mecanismo que utiliza el Gobierno para asegurar determinada cantidad de productos a un precio que queda congelado al momento de inicio del contrato. En la medida que solicita su provisión, se reciben y pagan los alimentos. La orden de compra abierta entre el 30 de septiembre de 2022 y el 30 de marzo de 2023 fue la primera que no llegó a agotar el inventario de medialunas. Según la fuente de Presidencia, esto se debe a que a finales del año pasado dejaron de ser gratuitas. Además, ese período coincide con la caída de las visitas a la Casa Rosada.
A propósito de la actividad en el sector presidencial, la cantidad de audiencias del presidente se redujo un 41,6% en el lapso analizado. Eso es lo que muestra el Registro Único de Audiencias.
“No hay reuniones de gabinete. El poder se trasladó al Palacio de Hacienda, el Ministerio de Economía”, relató Liliana Franco, también periodista acreditada en ese ministerio.
Esta visión también la comparte el funcionario presidencial consultado, quien además consideró la renuncia del ministro Martín Guzmán, el 2 de julio de 2022, como la fecha en la comenzó el descenso del movimiento dentro de la Casa Rosada.
El 24 de enero de 2022 el Gobierno autorizó una orden de compra abierta durante 6 meses de 9 ítems de panadería: miñones precocidos congelados, pan árabe, pan de hamburguesas, medialunas de manteca y de grasa, baguettes y figazzas.
El 28 de marzo de 2023 autorizó otra orden de compra, pero por cantidades superiores. En promedio, las unidades crecieron 56,5%.
Las medialunas de manteca (dulces) presentan un caso particular. El gobierno pagó por cada una de ellas un 49,1% más que el valor acordado por el Ministerio de Economía en el programa Precios Justos correspondiente a junio de 2023. La misma situación se repite en la compra de medialunas de grasa pero en 45,9%.
“Precios Justos a veces nos complica porque nadie nos va a ofertar ese producto con un mismo precio durante 6 meses mientras en el supermercado lo mantienen solo por 30 días”, explicó la fuente de Presidencia.
Más cantidad y precios más caros también se observan en la adquisición de agua mineral con y sin gas, aguas saborizadas y gaseosas.
Al comparar las órdenes de compra del 20 de julio de 2022 con la del 12 de mayo de 2023 el lote de botellas y latas creció en promedio un 22,6%. Gaseosa de 2,25 litros es el ítem con mayor aumento en unidades: 598,1%.
En materia de costo por unidad se registra un sobreprecio promedio del 25,1% entre los 21 ítems que conforman a la orden de compra para la Casa Rosada.
Este dato surgió de contrastar el precio adjudicado en la orden de compra de abril de 2023 con el del mismo producto, aunque de la marca más cara, publicados a principio de junio de 2023 en los sitios web de los supermercados minoristas Día, Coto, Disco y Carrefour.
Un ejemplo es el siguiente ejercicio: una lata de gaseosa de 354 ml fue licitada por 323,45 pesos (US$ 1,3). El precio de la lata de Coca Cola de 354 ml en la página de Disco asciende a 223,27 pesos (US$ 0,93) , en Día a 211,50 pesos (0,88 dólares), en Carrefour a 208 pesos (US$ 0,86) y en Coto a 222,96 pesos (US$ 0,92).
Estas diferencias de precio, según el funcionario consultado, pueden vincularse a los plazos en que paga el Estado.
Si bien las cláusulas particulares de las licitaciones a las que pertenecen cada una de las órdenes de compra abierta citadas estipulan un plazo de pago a 30 días, “el promedio de plazo de pago es de 75 días”, aseguró la fuente de Presidencia con conocimiento de estos procesos.
De hecho, aseguró esta fuente, “eso está documentado en informes de uso interno”, a los que CNN no ha tenido acceso.
Ante la pregunta sobre el riesgo de ser objeto de demandas judiciales por la tardanza en los pagos, respondió: “En esos casos, las empresas quedan rehén del Estado”, aunque agregó que “en muchos casos se trata de proveedores de hace años y saben que la dinámica del Estado es así”.
Por otra parte, la cantidad de ingresos de empleados acreditados en la Casa Rosada durante el mismo período analizado ascendió 13,8%, de acuerdo con la base de datos de “Movimientos generales” obtenida a través del pedido de acceso a la información pública. Dicha base de datos corresponde al sistema “Digicard” utilizado en los molinetes y pasarelas de acceso con huella digital.
En su mayoría, estas personas no pertenecen a las áreas de Presidencia o Jefatura de Gabinete, exceptuadas de pagar medialunas o gaseosas en lata o en botellas de 500 ml. Según explicó el funcionario de gobierno consultado, el consumo de este grupo está más vinculado a los insumos diarios del comedor, tales como frutas y verduras.
El incremento del 13,8% contrasta con el del volumen de alimentos en las órdenes de compra abierta para el menú del comedor, como frutas y verduras, que se triplicaron.
Según el proceso autorizado el 12 de abril de 2023, la cantidad de cajones de “bananas premium” aumentó 117,3%, las calabazas 220,2%, los champiñones 700%, entre otros alimentos.
En promedio, el crecimiento en cantidades ha sido del 210,1% en relación con la orden de compra abierta del 3 de diciembre de 2021.
Asimismo, la fuente de Presidencia con conocimiento de estas contrataciones informó que la cantidad total de platos servidos del comedor por día aumentó, en promedio, 55,5% “entre principios de 2022 y la actualidad”.
El funcionario le explicó a CNN que estos aumentos de cantidades se deben a una “ampliación de la oferta en el comedor”, que agregó frutas como postre y que además abastece a la dependencia de Secretaría General de Presidencia sobre la calle 25 de mayo del centro de Buenos Aires, cuya planta está compuesta por “200 a 250 personas”.
“Más allá de que sean 10 pesos o 500 millones, el problema es ético. El problema está en si se están usando los recursos públicos para lo que verdaderamente se tienen que usar porque ese funcionario tiene una responsabilidad en la utilización de los bienes que está penada por la ley de ética pública y que tiene que responder sobre eso”, sostuvo Secchi, de Poder Ciudadano.
Esta paradójica relación dispar entre el aumento de personas que ingresan a la Casa Rosada y la cada vez más grande cantidad de comida contrasta con una imagen que cada noche se repite en la Plaza de Mayo. Organizaciones solidarias reparten platos de comida para personas en situación de vulnerabilidad social.
De hecho, en Argentina, según el último dato oficial correspondiente al segundo semestre de 2022 el 54,6% de los menores de 17 años es pobre. Y, tal como consigna la Universidad Católica Argentina, 1 de cada 4 argentinos padece déficits de alimentación y salud.