La institución independiente compartió los detalles de la delegación que mantuvo en terreno venezolano, afirmando que hubo una serie de hechos que no se adecúan a "parámetros y estándares internacionales.
Este martes el Centro Carter compartió sus comentarios sobre lo que fue la jornada electoral del domingo 28 de julio en Venezuela, un proceso que aseguran no puede ser llamado democrático.
En medio de las críticas internacionales y los cuestionamientos internos sobre la transparencia del proceso y los resultados que el Consejo Nacional Electoral (CNE) venezolano dio por confirmados, el ente observador emitió una declaración en la que entregan los detalles de cómo se vivió el proceso y dónde visualizan los principales problemas.
“La elección presidencial de Venezuela de 2024 no se adecuó a parámetros y estándares internacionales de integridad electoral y no puede ser considerada como democrática”, comienza la declaración del Centro Carter.
Por un lado, en el comunicado apuntan al problema que se percibe en la forma en que la autoridad electoral omitió información en su reporte, como los resultados desglosados por mesa electoral, dato cuya ausencia “constituye una grave violación de los principios electorales”.
Así, continúa la declaración, el proceso estuvo marcado por “un ambiente de libertades restringidas en detrimento de actores políticos”, así como también la “parcialidad” que le atribuyen al CNE respecto al oficialismo.
“Las autoridades intentaron restringir las campañas de la oposición, incluyendo la persecución e intimidación de personas que prestaron servicios o vendieron bienes para el proselitismo opositor para generar un efecto disuasivo”, añaden.
En su trabajo en terreno, el Centro Carter contó con 17 expertos y observadores, desplegados en Caracas, Barinas, Maracaibo y Valencia.
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