Lai Ching‑te asumió la presidencia de Taiwán el lunes pasado y, desde el régimen popular chino, ya iniciaron despliegues en las cercanías de la frontera con el autogobierno. Los ejercicios vuelven a poner de manifiesto las preparaciones para un escenario de “bloqueo marítimo”, que sería, “más atractivo” para Pekín, en comparación con una hipotética invasión a gran escala.
(EFE) – China desplegó este jueves intensas maniobras militares en torno a Taiwán para presionar al territorio autogobernado apenas tres días después de la toma de posesión del nuevo presidente de la isla, Lai Ching-te.
Los ejercicios, que comenzaron a las 7:45 de esta mañana (hora local) y está previsto que continúen el viernes, incluyeron la participación de al menos 42 aviones y 31 barcos chinos en los alrededores de la isla y sus archipiélagos periféricos, informó el ministerio taiwanés de Defensa.
De esos 42 aviones, 28 cruzaron la línea divisoria del Estrecho de Taiwán, una frontera no oficial que había sido respetada por Pekín y Taipéi durante décadas, o penetraron en la autoproclamada Zona de Identificación Aérea (ADIZ) taiwanesa, la cifra más elevada en lo que va de año.
El ministerio también detectó 15 buques de la Armada y 16 barcos de la Guardia Costera china navegando por las inmediaciones de Taiwán y de las islas Kinmen, Matsu, Wuqiu y Dongyn, archipiélagos bajo control taiwanés y ubicados a escasos kilómetros de China, que considera a la isla como una “provincia rebelde”.
Mientras, el Comando del Teatro Oriental de Operaciones del Ejército Popular de Liberación (EPL) chino defendió que las maniobras, bautizadas como Joint Sword – 2024A (“espada unida” en inglés), son un “fuerte castigo” a los “actos separatistas” de quienes buscan “la independencia de Taiwán”.
Lai Ching-te / EFE
Pekín advierte contra “injerencias y provocaciones”
Desde Pekín, su portavoz de Exteriores Wang Wenbin argumentó que los ejercicios son “legítimos y necesarios” y están “en consonancia con el derecho y la práctica internacional”.
El portavoz chino recalcó que, además de “salvaguardar la soberanía y la integridad territorial”, los ejercicios buscan también “advertir seriamente a las fuerzas externas por su injerencia y provocaciones“, en referencia a Estados Unidos.
“Todos los actos separatistas en pro de la ‘independencia de Taiwán’ serán recibidos con un golpe frontal por parte de los más de 1.400 millones de chinos”, aseveró Wang, al tiempo que instaba a Washington a que “deje de tolerar y apoyar a las fuerzas de ‘independencia de Taiwán'” y a que “deje de interferir en los asuntos internos de China”.
El portavoz respondía así a las declaraciones que realizó el comandante general del mando Indopacífico de Estados Unidos, Stephen D. Sklenka, quien calificó desde Camberra las maniobras militares como “preocupantes”.
La isla es uno de los principales motivos de fricción entre China y EE. UU., ya que el país norteamericano es el principal proveedor de armas de Taiwán y podría intervenir para defenderla en caso de conflicto.
El militar estadounidense vinculó las maniobras militares chinas a la reciente investidura de Lai, que hoy aseguró que su Gobierno mostrará “determinación” a la hora de “proteger” la isla.
Lai resaltó su “confianza” en el Ejército isleño y pidió a todos los ciudadanos “que estén tranquilos”.
“Como comandante en jefe de las Fuerzas Armadas, mi responsabilidad es proteger a nuestro país y proteger las vidas y propiedades de todo el pueblo (taiwanés). Estaré en el mismo frente que mis hermanos y hermanas del Ejército para proteger conjuntamente la seguridad nacional“, señaló.
Primera oleada de 2024
Con los ejercicios de hoy, China vuelve a recurrir a este tipo de maniobras por cuarta vez desde 2022, cuando llevó a cabo los primeros de este calibre en respuesta a la visita de la entonces presidenta de la Cámara de Representantes de EE.UU., Nancy Pelosi, a Taiwán, que enfureció a Pekín y elevó la tensión en el estrecho a límites inéditos en décadas.
Aquella visita desdibujó la conocida como línea media del Estrecho, una frontera no oficial, pero cuya existencia China siempre ha negado, y marcó el aumento del número de incursiones de aviones chinos en la ADIZ taiwanesa.
Pekín realizó otras dos maniobras en abril y agosto de 2023, en las que, aseguró, “comprobó la capacidad de combate real” de las tropas participantes, aunque en los de hoy abarcó por primera vez los archipiélagos periféricos de Taiwán.
Los ejercicios vuelven a poner de manifiesto las preparaciones para un escenario de “bloqueo marítimo”, que sería, según analistas citados por el diario hongkonés South China Morning Post, “más atractivo” para Pekín, en comparación con una hipotética invasión a gran escala.
Según expertos en Defensa de la isla, la denominación “A” en el nombre de las maniobras podría sugerir que serían la primera oleada de una serie de ejercicios similares que sirven también como táctica de “guerra cognitiva” y con fines propagandísticos.