Felipe Herrera, un ingeniero chileno de 39 años, fue arrestado en Córdoba, Argentina, acusado de asesinar a su pareja, Christelle Heredia, de 34 años, tras una violenta discusión. En conversación con CNN Radio Córdoba, el hermano de la víctima señaló que Herrera, quien ya contaba con antecedentes previos por causas similares, "fue un persona siempre protegida" por su familia.
Felipe Herrera, un ingeniero chileno de 39 años, fue arrestado en Córdoba, Argentina, acusado de asesinar a su pareja, Christelle Heredia, de 34 años, tras una violenta discusión.
Según el medio trasandino Todo Noticias, Herrera apuñaló a Heredia en su departamento —ubicado en el barrio General Paz— el pasado domingo, 16 de junio, mismo día en que la policía llegó al lugar tras recibir denuncias de vecinos que escucharon gritos y golpes. El hombre fue detenido tras intentar autoinfligirse heridas y admitir haber estado bebiendo y consumiendo pastillas con la víctima.
En Chile, Herrera cuenta con antecedentes penales por causas similares. En agosto de 2022, fue sentenciado a 250 días de presidio por su autoría en el delito de lesiones menos graves en contexto de violencia intrafamiliar, hecho que ocurrió en la comuna de Las Condes, en la Región Metropolitana.
Este jueves, 20 de junio, durante la transmisión de una edición especial del programa Despierta Córdoba, de CNN Radio Córdoba, el hermano de la víctima, Maximiliano Herrera, rompió el silencio y ahondó en las circunstancias en que la familia fue informada del asesinato (que describió como “la peor forma de enterarse”).
¿Qué dijo el hermano de la víctima?
“Nosotros nos habíamos juntado, como todos los domingos. En este caso, era el Día del Padre, y Chris y Felipe estaban invitados“, explicó. Dada la tardanza de ambos frente a la cita, varios miembros de la familia enviaron mensajes de texto a la pareja, pero al notar que estos tampoco eran respondidos, asumieron que ambos se habían quedado dormidos.
Más tarde, y tras confirmar con una amiga de la víctima que esta llevaba horas hallándose completamente inubicable vía telefónica, decidieron ir a su domicilio.
“Llegamos, vemos el auto de Felipe estacionado en la cuadra y vemos la reja del balcón abierto. Abrimos la puerta, subimos por la escalera (…). Había mucha policía. Nos preguntaron quiénes éramos y yo ya me imaginé lo peor, lamentablemente”, señaló. “Fue uno de los momentos más difíciles de mi vida. Fue horrible“.
Maximiliano describió la relación entre su hermana y Felipe como aparentemente común en sus inicios. “A mí, la verdad, me parecía una persona normal. Compartió varios almuerzos en familia. Venía, comía, compartíamos un vino; hablábamos de fútbol, de tenis. A uno nunca se le pasa por la cabeza que va a pasar eso”.
También ahondó en parte de los detalles sobre el pasado violento de Herrera, incluyendo condenas previas en Chile por delitos similares.
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“Me enteré que él tenía una denuncia en el 2013, porque le partió un vaso en la cabeza a una chica y le tuvieron que hacer cirugía plástica. Estaba borracho y no lo pudieron agarrar, porque se metió a su casa y siempre con protección de los padres, siempre tapando todo“, mencionó. “Para mí, fue un persona siempre protegida. Allá se ve que le han tapado todo”.
Y en ese mismo contexto, Maximiliano aseguró que, cuando la policía hizo ingreso al departamento y el victimario se entregó, estaba llamando por teléfono a su madre, quien en Chile se desempeña como abogada.
Susana Corti, amiga cercana de Christelle, dijo al medio nacional 24 Horas que Felipe “dejó morir” a la víctima, “eso es lo desgarrador”.
La joven agregó que la pareja se conoció por Internet y que, desde el círculo amistoso, habían notado cambios preocupantes en la relación de Christelle con Herrera, quien la “maltrataba” y “humillaba” constantemente. También mencionó que su amiga se sentía atrapada en la relación, pues el chileno le amenazaba con inflingirse daño cuando sugería cortar el vínculo.
La investigación, en tanto, quedó en manos de la Fiscalía de Córdoba.