La embestida del grupo extremista islamista el pasado fin de semana incluyó miles de cohetes, misiles, drones, armas ligeras y munición, pese a que Gaza está casi completamente aislada del resto del mundo desde hace casi 17 años.
(CNN) – La brutal embestida del grupo extremista islamista Hamás contra Israel el pasado fin de semana incluyó miles de cohetes y misiles, drones que lanzaban explosivos y un número incalculable de armas ligeras y munición.
Pero el ataque se lanzó desde el enclave de Gaza, gobernado por Hamás, una franja de 360 kilómetros cuadrados de costa mediterránea que limita por dos lados con Israel y por uno con Egipto.
Es una zona pobre, densamente poblada y con pocos recursos.
Y ha estado casi completamente aislada del resto del mundo desde hace casi 17 años, cuando Hamás se hizo con su control, lo que llevó a Israel y Egipto a imponer un estricto asedio al territorio, que continúa.
Israel también mantiene un bloqueo aéreo y naval sobre Gaza, así como un amplio dispositivo de vigilancia.
Lo que nos lleva a preguntarnos: ¿Cómo ha conseguido Hamás acumular la cantidad de armamento que le ha permitido llevar a cabo ataques coordinados que han causado más de 1.200 muertos en Israel y miles de heridos, sin dejar de lanzar cohetes sobre Israel?
La respuesta, según los expertos, es una combinación de astucia, improvisación, tenacidad y un importante benefactor extranjero.
El factor Irán
“Hamás adquiere sus armas mediante el contrabando o la construcción local y recibe cierto apoyo militar de Irán“, señala el World Factbook de la CIA.
Aunque los gobiernos israelí y estadounidense aún no han encontrado ningún papel directo de Irán en los ataques del pasado fin de semana, los expertos afirman que la República Islámica es desde hace tiempo el principal apoyo militar de Hamás, que introduce armas de contrabando en el enclave a través de túneles transfronterizos clandestinos o de embarcaciones que han escapado al bloqueo mediterráneo.
“La infraestructura de túneles de Hamás sigue siendo enorme a pesar de que Israel y Egipto la degradan periódicamente”, afirma Bilal Saab, investigador principal y director del Programa de Defensa y Seguridad del Middle East Institute (MEI) de Washington.
“Hamás ha recibido armas de Irán introducidas de contrabando en Gaza a través de túneles. Esto incluía a menudo sistemas de largo alcance”, sostuvo Daniel Byman, investigador principal del Proyecto de Amenazas Transnacionales del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS).
“Irán también ha estado enviando a Hamás sus misiles balísticos más avanzados por mar, en componentes para su construcción en Gaza“, aseguró Charles Lister, investigador principal del MEI.
Pero Irán también ha sido un mentor, dicen los analistas.
“Irán también ayudó a Hamás con su fabricación autóctona, permitiendo a Hamas crear sus propios arsenales”, afirmó Byman, del CSIS.
Un alto cargo de Hamás con sede en Líbano dio detalles de la fabricación de armas en una entrevista editada con el canal de noticias en árabe RTArabic de Russia Today publicada en su sitio web el domingo.
“Tenemos fábricas locales para todo, para cohetes con alcances de 250 km, para 160 km, 80 km y 10 km. Tenemos fábricas de morteros y sus proyectiles. Tenemos fábricas de Kalashnikovs (fusiles) y sus balas. Estamos fabricando las balas con permiso de los rusos. Las estamos construyendo en Gaza”, según Ali Baraka, jefe de Relaciones Nacionales de Hamás en el Exterior.
Reciclaje
En cuanto a los artículos de mayor tamaño, Lister, del MEI, señaló que el Cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica de Irán, una rama del ejército iraní que responde directamente ante el líder supremo del país, lleva casi dos décadas impartiendo formación armamentística a los ingenieros de Hamás.
“Años de tener acceso a sistemas más avanzados han proporcionado a los ingenieros de Hamás los conocimientos necesarios para mejorar significativamente su capacidad de producción nacional“, afirmó Lister.
Y Teherán mantiene al día la formación de los fabricantes de armas de Hamás, añadió.
“Los ingenieros de cohetes y misiles de Hamás forman parte de la red regional iraní, por lo que la formación y el intercambio frecuentes en el propio Irán forman parte de los esfuerzos de Irán por profesionalizar sus fuerzas de representación en toda la región”, sostuvo Lister.
Pero la forma en que Hamás obtiene las materias primas para esas armas autóctonas también demuestra el ingenio y la inventiva del grupo.
Gaza carece de la industria pesada necesaria para la producción de armas en la mayor parte del mundo. Según el CIA Factbook, sus principales industrias son la textil, la alimentaria y la del mueble.
Pero entre sus principales exportaciones está la chatarra, que puede proporcionar material para fabricar armas en la red de túneles bajo el enclave.
Y ese metal procede en muchos casos de anteriores combates destructivos en Gaza, según Ahmed Fouad Alkhatib, que escribió sobre ello para el Foro Fikra del Washington Institute for Near East Policy en 2021.
Cuando la infraestructura de Gaza ha sido destruida en ataques aéreos israelíes, lo que queda –chapa de metal y tuberías de metal, barras de refuerzo, cableado eléctrico– ha encontrado su camino en los talleres de armas de Hamás, emergiendo como tubos de cohetes u otros dispositivos explosivos, escribió.
El reciclaje de municiones israelíes sin explotar por su material explosivo y otras piezas se suma a la cadena de suministro de Hamás, escribió Alkhatib.
“La operación de las FDI proporcionó indirectamente a Hamás materiales que, de otro modo, estarían estrictamente controlados o totalmente prohibidos en Gaza“, escribió.
Por supuesto, todo eso no ocurrió de la noche a la mañana.
Disparar tantas municiones como lo hizo el sábado en un período tan corto significa que Hamás debe haber estado acumulando su arsenal, tanto mediante el contrabando como mediante la fabricación, a largo plazo, dijo Aaron Pilkington, analista de la Fuerza Aérea de Estados Unidos sobre asuntos de Oriente Medio y candidato a doctor en la Universidad de Denver.
Baraka, el responsable de Hamás en Líbano, declaró que el grupo extremista llevaba dos años preparando el atentado del pasado fin de semana.
No mencionó ninguna participación exterior en la planificación del atentado, y en el informe de los medios rusos se limitó a decir que los aliados de Hamás “nos apoyan con armas y dinero. Ante todo, es Irán quien nos da dinero y armas”.
Los analistas también afirman que el tamaño y el alcance de las incursiones de Hamás contra Israel les pilló desprevenidos, así como a los servicios de inteligencia israelíes y de otros países.
“Es importante recordar que disparar un montón de cohetes es en realidad muy poco complicado“, dijo Pilkington.
“Lo sorprendente es cómo se pueden almacenar, trasladar, preparar y disparar miles de cohetes eludiendo a los servicios de inteligencia israelíes, egipcios, saudíes, etc. Es difícil ver cómo los combatientes palestinos podrían haber hecho esto sin la orientación iraní“, cerró.