De 2019 a 2020, la tasa general de homicidios con armas de fuego subió de 4,6 muertes a 6,1 muertes por cada 100.000 personas en todo el país, donde los mayores aumentos en 2020 se produjeron entre los niños y hombres negros de 10 a 44 años y los hombres nativos estadounidenses o nativos de Alaska de 25 a 44 años.
(CNN) — La tasa de muertes relacionadas con armas de fuego en Estados Unidos parece estar empeorando. La tasa de homicidios con armas de fuego en EE.UU. en 2020 fue la más alta registrada desde 1994, según los datos publicados este martes por los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de EE.UU. (CDC, por sus siglas en inglés).
Entre 2019 y 2020, la tasa general de homicidios con armas de fuego aumentó alrededor del 35%, según los nuevos datos del Informe Semanal de Morbilidad y Mortalidad de los CDC.
Lee también: Asesinaron en Colombia a fiscal paraguayo especializado en la lucha contra el narcotráfico
“La pandemia de COVID-19 podría haber exacerbado los factores de estrés social y económico existentes que aumentan el riesgo de homicidio y suicidio, particularmente entre ciertas comunidades raciales y étnicas”, escribieron los investigadores de los CDC en su informe.
“Los aumentos en las tasas de homicidio con armas de fuego y las tasas de suicidio con armas de fuego persistentemente altas en 2020, con aumentos entre las poblaciones que ya estaban en alto riesgo, han ampliado las disparidades y aumentado la urgencia de las acciones que pueden tener beneficios inmediatos y duraderos“.
En 2020, el 79% de todos los homicidios y el 53% de todos los suicidios se produjeron con armas de fuego, según los CDC, lo que es algo más alto que durante los cinco años anteriores. Los investigadores de los CDC examinaron los datos sobre las muertes por arma de fuego procedentes de los Sistemas Nacionales de Estadísticas Vitales y del Centro Nacional de Estadísticas Sanitarias de la agencia, al tiempo que examinaron detenidamente los datos a nivel de condado y los datos de la Oficina del Censo de EE.UU. sobre la pobreza.
Lee también: Aumenta la tensión entre Israel y Hamás en el primer aniversario del conflicto bélico en Gaza
Los investigadores descubrieron que, durante la pandemia en 2020, los condados estadounidenses con mayor nivel de pobreza presentaban tasas de homicidio y suicidio por arma de fuego 4,5 y 1,3 veces mayores, respectivamente, que los condados con menor nivel de pobreza. “Para mí es una gran lección. Porque si vamos a mirar dónde intervenir, es en muchas de estas comunidades en desfavorecidas”, sostuvo la Dra. Debra Houry, subdirectora principal interina y jefa del Centro Nacional para la Prevención de Lesiones.
De 2019 a 2020, la tasa general de homicidios con armas de fuego subió de 4,6 muertes a 6,1 muertes por cada 100.000 personas en todo el país, según los nuevos datos. Pero ese aumento no se distribuyó de manera equitativa, lo que revela la ampliación de las disparidades en los homicidios.
Los mayores aumentos en 2020 se produjeron entre los niños y hombres negros de 10 a 44 años y los hombres nativos estadounidenses o nativos de Alaska de 25 a 44 años, según los datos. Las conclusiones de los CDC sobre la tasa de homicidios con armas de fuego coinciden con el Informe Uniforme sobre la Delincuencia 2020 del FBI, publicado en septiembre del año pasado.
Lee también: El Príncipe Carlos pronuncia el Discurso de la Reina por primera vez
Los datos del FBI muestran un aumento del 29,4% en los homicidios entre 2019 y 2020, el mayor salto que la agencia ha registrado. El informe registró la tasa de homicidios en Estados Unidos en 6,5 por cada 100.000 personas. El informe también afirmó que los homicidios se llevan a cabo cada vez más con armas de fuego, afirmando que alrededor del 77% de los homicidios reportados en 2020 fueron cometidos con un arma, frente al 74% en 2019. No hay una base de datos federal de ventas de armas, pero otros estudios independientes encontraron que las ventas de armas se dispararon durante la pandemia de COVID-19.
Mientras tanto, la tasa general de suicidio con armas de fuego entre personas de 10 años o más se mantuvo casi nivelada entre 2019 y 2020, subiendo solo ligeramente de 7,9 a 8,1 muertes por cada 100.000 personas, encontraron los investigadores de los CDC en su nuevo informe.