La policía señaló que "no podemos decir que no existe una amenaza para la comunidad", por lo mismo, pidieron a la población a cuidarse. "Había bastante sangre", comentó la forense del cuádruple homicidio ocurrido en Moscow.
(CNN) – La policía de Moscow, Idaho, pidió a la población que se mantenga alerta luego de proporcionar nuevos detalles sobre un homicidio cuádruple ocurrido cerca del campus de la Universidad de Idaho. Entre los nuevos detalles figura que dos compañeras de habitación se encontraban en la casa donde estudiantes fueron asesinados en el momento del ataque y que la puerta de la casa estaba abierta cuando los agentes llegaron a la escena del crimen.
“No podemos decir que no existe una amenaza para la comunidad y, como ya hemos dicho, manténganse alerta, informen sobre cualquier actividad sospechosa y estén atentos a su entorno en todo momento”, dijo este miércoles el jefe de policía de Moscow, James Fry, durante una conferencia de prensa. Antes, la policía había dicho que no había una amenaza para la comunidad.
Los nuevos detalles de la investigación se dieron a conocer días después de que cuatro estudiantes de la Universidad de Idaho (Ethan Chapin, Xana Kernodle, Madison Mogen y Kaylee Goncalves) fueran encontrados muertos en una sangrienta escena del crimen este domingo por la tarde, destrozando la sensación de seguridad de la pequeña comunidad universitaria que se encuentra cerca de la frontera entre Idaho y Washington.
La policía local ha estado trabajando con la Policía Estatal de Idaho y con el FBI, pero aún no tienen sospechoso, móvil del crimen ni el arma, lo que preocupa a la ciudad de 25 mil habitantes que no había registrado un asesinato desde 2015, según datos de la policía estatal.
El crimen nos ha “afectado a todos, a las familias, a la Universidad de Idaho, a nuestra comunidad, a nuestro país y a nuestros oficiales”, dijo Fry. “Estamos revisando el video que obtuvimos, pero les pedimos a los ciudadanos que se comuniquen con nosotros con cualquier información que puedan tener que ayude en esta investigación”, agregó.
“Varios de nuestros estudiantes quieren ir a clase”, dijo Green este miércoles. “Se sienten cómodos estando cerca de otros estudiantes. Se sienten cómodos interactuando y manteniéndose ocupados con su facultad, y asistiendo a clases, a los laboratorios; algunos están trabajando en sus proyectos semestrales, por lo que hemos sabido”. Green dijo que la escuela está “animando a los estudiantes y empleados a tener cuidado” mientras se acercan las vacaciones de acción de gracias.
En un comunicado publicado este miércoles, Green dijo que la escuela ha “presionado continuamente para obtener la mayor cantidad de información posible, sabiendo que no podemos interferir con el importante trabajo de una buena investigación”. “Solo queremos justicia para las víctimas”, dijo.
Los agentes investigan el domingo en el lugar del cuádruple homicidio en una casa cerca de la Universidad de Idaho. Mientras avanza la investigación, la policía ha comenzado a trazar una cronología de lo sucedido en las horas previas a los asesinatos.
Lo que sabe la policía
Chapin y Kernodle estaban en una fiesta en el campus el sábado por la noche, mientras que Mogen y Goncalves se encontraban en un bar del centro antes de que todos regresaran a la casa el domingo en la madrugada, en algún momento después de la 1:45 a.m., dijo Fry.
Mogen y Goncalves fueron vistos haciendo un pedido en un camión de comida nocturno en Moscow esa noche, según muestra una transmisión en vivo de Twitch del programa de Grub Truckers. La pareja se acercó al camión alrededor de la 1:41 a.m., hizo un pedido de comida y conversó entre ellos y con otras personas mientras esperaban su pedido. Joseph Woodall, de 26 años, quien maneja el camión, dijo que los dos estudiantes no parecían estar en peligro o angustiados.
Las cuatro víctimas murieron en algún momento de la madrugada de este domingo, dijo Fry, pero no hubo una llamada al 911 hasta el mediodía. Las cuatro víctimas fueron apuñaladas con un cuchillo. El jefe de la policía no reveló quién llamó al 911, pero dijo que otros dos compañeros de habitación estaban en la casa en el momento de las muertes, ninguno de los cuales resultó herido ni fue tomado como rehén.
“No solo nos enfocamos en ellos, nos enfocamos en todos los que podrían haber estado yendo y viniendo de esa residencia”, dijo. Los dos compañeros de cuarto han cooperado completamente con las fuerzas del orden, dijo este miércoles a CNN el portavoz de la Policía Estatal de Idaho, Aaron Snell.
En el sentido de las agujas del reloj, desde la izquierda: los estudiantes de la Universidad de Idaho Madison Mogen, Ethan Chapin, Xana Kernodle y Kaylee Goncalves.
Después de la llamada al 911 sobre una persona inconsciente, los oficiales encontraron la puerta de la casa abierta y una espantosa escena del crimen en el interior. No hubo evidencia de entrada forzada, dijo Fry. “No estamos 100% seguros de que la puerta estuviera abierta, pero no hubo daños en nada y la puerta todavía estaba abierta cuando llegamos al lugar”, dijo Fry.
La forense del condado de Latah, Cathy Mabbutt, le dijo el martes a KXLY, afiliada de CNN, que había “bastante sangre en el apartamento. Fue bastante traumático encontrar a cuatro estudiantes universitarios muertos en una residencia”.
Mabbutt añadió que las autopsias podrían proporcionar más información sobre lo sucedido. “Podría haber algo, ya sabes, alguna evidencia del sospechoso que obtengamos durante las autopsias que sea útil”, dijo Mabbutt.
Las familias rinden homenaje
Apenas unas horas antes de su muerte, Goncalves publicó una foto del cuarteto con el título “(soy) una chica afortunada por estar rodeada de estas personas todos los días”, y agregó un emoji de corazón. La joven de 21 años de Rathdrum, Idaho, era una estudiante de último año con una especialización en estudios generales y miembro de la hermandad Alpha Phi.
Su hermana mayor, Alivea Goncalves, envió una declaración al Idaho Statesman en nombre de su familia y la de Mogen: “Eran inteligentes, estaban atentos, eran cuidadosos y todo esto igual sucedió. Nadie está bajo custodia y eso significa que nadie está a salvo. Sí, estamos desconsolados. Sí, estamos aguantando, pero más fuerte que cualquiera de estos sentimientos es la ira. Estamos enfadados. Tú también deberías estar enojado”.
Mogen, de 21 años, era de Coeur d’Alene, Idaho, y estaba en su último año con una especialización en marketing. Era miembro de la hermandad de mujeres Pi Beta Phi.
Chapin, de 20 años, era uno de tres trillizos, todos matriculados en la Universidad de Idaho, informó su familia en un comunicado. Era un estudiante de primer año de Conway, Washington, con especialización en administración de recreación, deportes y turismo. Fue miembro de la fraternidad Sigma Chi. “Ethan iluminaba cada habitación en la que entraba y era un hijo, hermano, primo y amigo amable, leal y amoroso”, dijo su madre, Stacy Chapin. “Las palabras no pueden expresar el dolor y la devastación que está experimentando nuestra familia. Me rompe el corazón saber que nunca podremos volver a abrazar o reír con Ethan, pero también es insoportable pensar en la forma horrible en que nos lo quitaron”.
Kernodle, de 20 años, era de Avondale, Arizona. Se estaba especializando en marketing y era miembro de la hermandad de mujeres Pi Beta Phi. Era “positiva, divertida y amada por todos los que la conocieron”, dijo su hermana mayor, Jazzmin Kernodle. “Era tan alegre y siempre levantaba el ánimo de la habitación”, dijo Jazzmin Kernodle. “Me convirtió en una hermana mayor orgullosa, y desearía haber podido pasar más tiempo con ella. Le quedaba tanta vida por vivir. Mi familia y yo nos quedamos sin palabras, confundidos y esperando ansiosamente actualizaciones sobre la investigación”.