La torre Garisenda en Bolonia, que se ha mantenido en pie durante casi 1.000 años, es la razón por la que la ciudad está impulsando un plan de protección civil por un eventual y repentino colapso. La advertencia de un posible derrumbe fue emitida en un informe de 27 páginas por el comité científico que monitorea el sitio desde 2019.
(CNN) – Es la “torre inclinada” que se ha mantenido en pie, torcida pero constante, durante casi 1.000 años. Pero ahora, los días de la torre Garisenda en Bolonia, Italia, podrían estar contados.
Tras unas investigaciones del mes pasado, la ciudad está impulsando un plan de protección civil para el “colapso repentino e inesperado de la torre”, que ha dominado el horizonte de Bolonia desde el siglo XII.
Se levantará un cordón metálico de protección para “contener los escombros resultantes de un posible derrumbe, reducir la vulnerabilidad de los edificios circundantes y la exposición de la población, así como bloquear el acceso a la zona prohibida“, dijo el ayuntamiento en una declaración.
El cordón estará fijado al suelo, e incluirá redes de protección especialmente diseñadas contra caídas de rocas, que también son metálicas y estarán ancladas al suelo.
La advertencia de un posible colapso fue emitida en un informe de 27 páginas, compartido con CNN, por el comité científico que monitorea el sitio desde 2019.
Pone el lugar en “alerta máxima” y afirma que los expertos “consideran que ya no existen condiciones de seguridad para operar en la torre o sus alrededores, excepto en el marco de un plan de protección civil”.
El monitoreo del sitio durante el último mes ha revelado una “tendencia inesperada y acelerada” de compresión “aplastante” en la base de la torre, con desintegración gradual de la piedra utilizada para revestir la base y grietas que se expanden en el ladrillo de arriba, dice.
Los trabajos de consolidación que ya estaban en marcha se han detenido y se construirá una zona de exclusión “lo más rápido posible”.
Sin embargo, la torre no está al borde del colapso inmediato, dijo un portavoz a CNN.
“Estamos actuando como si fuera el peor de los casos, pero eso no quiere decir que vaya a suceder“, dijo, y agregó que las precauciones se encuentran actualmente en alerta “amarilla” en lugar de roja, donde el colapso es inminente.
“Estamos actuando como si estuviera a punto de colapsar, pero nadie sabe cuándo podría ser: podrían ser tres meses, 10 años o 20 años”.
“Si hubiera un riesgo inminente de colapso, evacuaríamos a todos“, dijo, y agregó que el equipo de monitoreo proporciona lecturas cada 15 minutos, lo que significa que deberían recibir una advertencia de un colapso y podrían evacuar el área circundante.