El perro Willow de 14 años, falleció el domingo en el castillo de Windsor tras una batalla contra el cáncer.
(CNN en Español) – La reina Isabel II de Inglaterra ha perdido al último descendiente de su corgi original después de que Willow, de 14 años, falleciera el domingo en el castillo de Windsor tras una batalla contra el cáncer, según reportes de medios de Gran Bretaña.
Willow era el último en una larga línea de corgis reales propiedad de la monarca británica, la que tiene el reinado más largo de la historia, informó el diario Daily Mail.
El palacio de Buckingham declinó hacer comentarios sobre la muerte del perro, diciendo a CNN que se trataba de un tema privado.
La afición de la reina por los corgis es bien conocida, con Willow y la monarca incluso apareciendo junto al actor de James Bond, Daniel Craig, para un sketch mostrado durante la ceremonia de apertura de los Juegos Olímpicos de Londres 2012.
La reina Isabel II ha tenido mas de 30 corgis en su reinado
Mientras que la reina todavía posee otros perros, Willow era el único descendiente restante de Susan, la corgi original dada a la entonces princesa Isabel en su 18 cumpleaños, en 1944.
Ella recibió a Susan como un regalo después de que fuera unida al corgi de su padre, el rey Jorge VI, llamado Dookie, informó el Daily Mail.
Desde entonces, ha sido dueña de docenas de perros de la raza, conocida por sus distintivas patas cortas y sus orejas erguidas.
Tal era el apego de la reina Isabel a Susan que, según los reportes, llevó a la perra de luna de miel con el príncipe Felipe, en 1947.
La pareja real también ha sido dueña de “dorgies”, un cruce entre un dachshund y un corgi.
La reina Isabel II con sus corgis, en 1969
Más recientemente, la prometida del príncipe Harry, Meghan Markle, parece haberse ganado a los queridos caninos.
“Pasé los últimos 33 años recibiendo ladridos. Este entra y nada, solo menea la cola”, dijo el nieto de la reina en una entrevista de la BBC en noviembre, haciendo un gesto hacia Meghan.
“Están recostados sobre mis pies durante el té”, respondió Meghan, riendo con el príncipe.